Este miércoles 31 de agosto la revista Alma Mater anunció en su perfil de Facebook un conjunto de cambios que se implementarán en el proceso de ingreso a la Educación Superior cubana para el actual periodo lectivo.
“En el mes de diciembre pretendemos cerrar el curso. El 6 de febrero debe iniciar el curso 23 para los de nuevo ingreso, y el 20 de febrero inicia para los continuantes”, informó el medio oficialista, a la vez que especificó que la matrícula actual supera los 280 mil estudiantes. Al referirse al curso diurno, indicó que se “apostará por una mayor presencialidad”.
Según la revista universitaria, se espera que más de 25 mil estudiantes culminen sus estudios en diciembre, para lo cual las universidades “han adoptado diversas variantes” con el fin de garantizar ese egreso masivo.
La redacción del medio abrió un espacio de preguntas y respuestas sobre el proceso de ingreso a la Educación Superior en el cual autoridades de las casas de altos estudios ofrecen detalles y pormenores del proceso.
Uno de los elementos más notables es que, para ingresar al curso diurno “no será obligatorio aprobar con un mínimo de 60 puntos” los exámenes de Matemática, Español e Historia de Cuba.
Con respecto a tales medidas, el periodista José Raúl Gallego declaró en su perfil de Facebook: “Es como si ya supieran que van a perder el país y están haciendo todo lo posible para entregárnoslo hecho (más) cenizas”.
En los comentarios al post original, el usuario Karlo Coto consideró que “lo que pasa es que están desesperados, todos los profesionales se han ido del país y una cantidad increíble de estudiantes de medicina han abandonado la carrera, estudiantes y médicos formados”, tras lo cual apuntó a la desvaloración de las profesiones en Cuba, pues señala que “un 'luchador' vive mucho mejor que un profesional”.
La internauta Alegna Muro refirió que “si hace años, en los exámenes de ingreso, un aspirante puso en su prueba que José Martí, Máximo Gómez, y Villena bajaron de la Sierra Maestra a asaltar el Cuartel Moncada qué se puede esperar ahora que ni la calidad importa. Cuba involuciona, y a quien le duele es a los cubanos”.
Dariel Mena, por su parte, comentó que "El punto crucial aquí no son las competencias y habilidades, o la vocación incluso. Es sin lugar a dudas, el factor ideológico. Fidelidad y la obediencia política, ya será suficiente para poder estudiar una carrera universitaria en Cuba".
