Polémica con diseño de uniformes del “Cuba” al Clásico: ¿plagio y se equivocan de logo?
El diseñador Carlos Rojas posteó evidencias de que “lo copiaron”, pero el diario Jit respondió que “se advierten claras diferencias”
Actualizado: January 10, 2023 12:18pm
El diseñador cubano radicado en Estados Unidos Carlos Rojas, miembro de la Sociedad Americana para la Investigación del Béisbol (SABR por su sigla en inglés), denunció en su canal oficial de Twitter, con evidencias visuales, que el diseño del uniforme del team Cuba al V Clásico Mundial es un plagio de trabajos suyos.
“Esta es una de las páginas de las propuestas diseñadas por mí, la cuales fueron presentadas a Rob Manfred en la reunión con los miembros de la @beisprocuba. Para que @jit_digital y @CubanaBeisbol sepan que sus diseñadores copian de sus contrapartes. Sean más originales porfa”, escribió Rojas.
Rojas añadió que “la marca Teammate”, detrás del nuevo diseño del equipo Cuba al Clásico, utilizó “el empleo del degradado en las mangas del homeclub y en los uniformes de visitante y alternativo”. También aseguró que “el logo del Clásico es otro”.
“Muy, muy similar a trabajos míos sobre uniformes que he hecho anteriormente. Por ejemplo, el traje de visitador es muy parecido al concepto del 2020, solo alternando el orden del degradado y el logo de Cuba de la camisa, es casi una copia al que diseñé para @SwingCompletoBB en 2021”, precisó.
Por su parte, el diario deportivo del oficialismo, Jit, le contestó al diseñador en Twitter, asegurando que sus palabras y acusaciones eran “inadmisibles”. En el texto se añade que Rojas no había “inventado” el degradado, “ni las estrellas, ni los trazos y nuestra propuesta es mucho más integral”. Luego borraron el tuit de respuesta y bloquearon al usuario de Rojas en la red social.
Más tarde, en la red social de Facebook, el mismo diario amplió su respuesta “a los terroristas mediáticos”, aunque eliminó la posibilidad de que le comentaran la publicación. En este post aseguran que “a primera vista se advierten claras diferencias con la referencia”.
“La idea es siempre chillar, desacreditar, odiar. Obvio que no vale la pena preguntarles por la legitimidad de la obra que defienden (…) la protección intelectual en la Isla y sus vínculos con la entidad con derechos exclusivos para diseñar el uniforme de Cuba, aprobar sus colores, trazos, símbolos”, dijeron.
“Sirvan estas líneas de respeto y consideración para quienes por semanas trabajaron en la propuesta y la hicieron realidad, al punto de que poco a poco sale de fábrica directo a sus dueños: los jugadores que la llevarán y los aficionados que la disfrutarán con sano orgullo. Lo demás son fouls hacia fuera del estadio”, concluyeron.