Otra iglesia católica habanera violentada en menos de un mes

El realizador audiovisual cubano Adrián Martínez denunció en su perfil de Facebook el nuevo ataque que recibió la iglesia católica del Sagrado Corazón de Jesús, en el Vedado habanero, en la que oficia el párroco Léster Rafael Zayas Díaz, crítico abierto del régimen cubano.

Martínez comentó que los “ataques a las Iglesias católicas cada vez son más frecuentes” en la isla y se cuestionó si Dios confundía a los ladrones, o si estos en realidad no son ladrones. En cuanto a la iglesia de Fray Léster, dijo que esta es la segunda ocasión en menos de un mes en que resulta violentada por supuestos “ladrones”.

“Este 5 de abril Fray Léster ha sido nuevamente víctima de lo que pareciera un robo, pero esta vez en la Iglesia de Jesús Obrero, otra comunidad donde celebra la eucaristía desde noviembre del año pasado”, escribió.

El realizador explicó que en esta oportunidad ingresaron al templo rompiendo la puerta lateral y que, aunque removieron algunas cosas y partieron unos cables conectados entre una laptop y un proyector, no se llevaron nada.

"Curiosamente la iglesia queda frente a la entrada principal de la unidad militar de tropas especiales (boinas negras) del barrio llamado el Fanguito, donde el presidente Miguel Díaz Canel jugara un partido de béisbol cuatro días antes. A pesar de los guardias permanentes, nadie vio ni escuchó nada”, agregó.

El joven precisó que esta no es la única iglesia donde ha ocurrido algo así, pues hace un par de días habían entrado al santuario de Arroyo Arenas y desorganizado todo, para, finalmente, no llevarse nada.

“¿Son estos malos ladrones? ¿Son ladrones? ¿Quién está detrás de estos sucesos? ¿Cuál es la intención?”, insistió en sus preguntas.

Al respecto, un usuario de Facebook le respondió a Martínez que “eso parece las típicas "advertencias" intimidatorias de raqueteros del crimen organizado con la intención de silenciar a la Iglesia y a sus sacerdotes e impedirle cumplir su misión profética”.

A inicios de marzo, el párroco Léster Rafael Zayas Díaz denunció en sus redes sociales que las alcancías del diezmo de su templo habían sido violentadas y que los ladrones habían robado el dinero de los feligreses.

“Con tristeza y preocupación y para tranquilidad de nuestros fieles comunico que al abrir el templo en el día de hoy descubrimos con tristeza que alguna persona inescrupulosa entró en nuestro templo y forzó las alcancías llevándose el dinero que buenamente la feligresía ofrece para cubrir los gastos y las obras de la parroquia”, expresó el sacerdote entonces.