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Desalojan a familias en medio de fiestas navideñas por "posible derrumbe"

Agentes de la policía y funcionarios del régimen ordenaron a unas 20 familias abandonar el edificio donde residen en La Habana

Actualizado: Thu, 12/29/2022 - 16:45

Unas 20 familias tuvieron que abandonar este miércoles sus viviendas en el edificio #231 de la calle Bernaza, entre Muralla y Brasil, en La Habana Vieja, después de que agentes de la policía y funcionarios de Vivienda y el gobierno municipal, les exigieran desalojar el inmueble por una "alerta de derrumbe".

Según declararon a CubaNet varios de los desplazados, tras el paso del huracán Ian en septiembre, los funcionarios de Vivienda habían intentado el desalojo en dos ocasiones, pero las familias se resistieron y siguieron en el edificio porque nunca les fueron facilitadas nuevas ubicaciones.

Uno de los damnificados, Luis Ángel Robaina Gómez, aseguró que esta vez fueron obligados a sacar sus pertenencias. El desalojo comenzó en la mañana de este miércoles, y en la tarde, aún las personas continuaban sentadas en la calle, sin saber dónde serían reubicadas.

Robaina explicó que “hay vecinos que se fueron, pero la mayoría no quieren porque esta es su casa y es lo único que tienen. Por debajo del telón se está cuadrando que, si Vivienda no resuelve el problema, por la noche todo el mundo vuelve para lo suyo y que vengan a sacarnos de nuevo”.

Desde finales de los años 90 el edificio #231 de la calle Bernaza fue declarado inhabitable. Las recientes lluvias empeoraron la situación estructural del inmueble. Vecinos del lugar dijeron a CubaNet que el pasado fin de semana se desprendieron pedazos de las cubiertas de los tres niveles que tiene la construcción.

Desalojo Habana Vieja
Vecinos del edificio #231. Foto: CubaNet

Vecinos del lugar habrían avisado a las autoridades. Yamilet Quesada Triana, una de las inquilinas, señaló que en los edificios circundantes también se sintieron fuertes estruendos tras la caída de trozos de concreto.

“Tuvieron que hacer la denuncia —los vecinos— porque esa situación afecta sus viviendas, que de paso tampoco están buenas. Tienen sus grietas, como todas las construcciones antiguas de La Habana. Pintado así —el edificio— engaña, pero es una vieja con colorete. Por dentro está podrido”, dijo la mujer.

Brian Moreira Rodríguez, otro de los afectados, contó al medio citado: “Este apartamento me lo dejó mi difunta madre, imagínate el dolor si finalmente tengo que dejarlo. Ahora mismo nadie sabe para dónde va, ni hasta cuándo, y ya estamos con el fin de año al doblar de la esquina. Es mejor que me dejen morir aquí, lo pierdes todo y el jodido Gobierno no hace nada por ayudar”.

Mientras el régimen cubano continúa impulsando el turismo y la construcción de lujosos hoteles en el país, miles de cubanos no tienen vivienda o residen aún en casas con pisos de tierra. A inicios de 2022, casi 90 000 viviendas en Cuba todavía tenían piso de tierra, según informó la directora nacional de Vivienda del Ministerio de la Construcción, Vivian Rodríguez Salazar.

Además, según los últimos datos oficiales publicados por el Gobierno cubano, el déficit de viviendas en la isla era de 929 695. Las construcciones del Estado, por otra parte, no cubren la demanda anual.