Sobrevive niño cubano de 3 años que se tragó un clavo

Un niño de tres años que se tragó un clavo fue salvado el sábado por médicos de la ciudad cubana de Holguín, según reportes de la prensa local.

Mavil Isabel Benítez Fernández, especialista de Segundo Grado en Otorrinolaringología, dijo al periódico estatal ¡ahora! que la noche del sábado 4 de marzo “fue muy ardua” para otorrinos, anestesistas y personal de salón de operaciones del hospital pediátrico Octavio de la Concepción de la Pedraja: debían intervenir al menor que tenía alojado un cuerpo extraño a nivel de bronquio tronco derecho.

El niño fue remitido desde el municipio de Cueto porque accidentalmente había broncoaspirado un clavo y lo tenía alojado en el pulmón derecho.

“Realizamos una broncoscopía exploradora, este es un proceder muy riesgoso, porque supone actuar con un broncoscopio rígido de 6,7 milímetros, que entra a través de la boca, pasa por la laringe, la tráquea y llega entonces al pulmón, hasta de donde se extrae el cuerpo extraño”, explicó la doctora.

Benítez Fernández agregó que el procedimiento supone varios riesgos, que van desde el desgarro de la mucosa, sangramiento, perforación de tráquea y/o bronquios hasta el paro cardiorrespiratorio y la muerte del paciente.

Afortunadamente, la operación del niño tuvo un final feliz, pues en 25 minutos se logró extraer el clavo. A continuación, el paciente fue ingresado, estable, en la Unidad de Cuidados Intensivos.

Según el medio citado, durante el presente año los especialistas en Otorrinolaringología de Holguín han tenido otros dos casos similares, uno cada mes. El primero fue por un grano de maíz; el segundo por un frijol y ahora en marzo ocurre el accidente con el clavo.

Benítez Fernández advierte que la broncoaspiración de cuerpos extraños por los niños se produce en pacientes cuyas manos ya tienen la función de “pinza digital”, por lo que pueden introducirse objetos en la boca.

La doctora señala la importancia de que una persona adulta siempre esté supervisando al niño, nunca deben jugar solos ni dejarles a su alcance objetos que puedan introducirse en la boca, nariz u oídos.

Sobre el caso del menor del municipio Cueto explicó la especialista que el niño le dijo a la mamá que “picaba” la garganta. Al insistir en la conversación el pequeño confesó haberse tragado un clavo, por lo cual fue trasladado de urgencia a una consulta, en su pueblo, donde se confirmó el accidente con estudios de Rayos X.