Reportan brote de hepatitis en prisión Combinado del Este, en La Habana
El activista y expreso político Alejandro Garlobo comunicó que la situación en la cárcel es crítica por la ausencia de medicinas y la falta de atención médica.
Creado: December 17, 2024 12:24pm
Actualizado: December 17, 2024 12:57pm
El número de casos con hepatitis ha aumentado dentro de la prisión de máxima seguridad Combinado del Este, en La Habana.
Una fuente interna que atiende a los reos enfermos le comunicó al activista y expreso político Alejandro Garlobo que actualmente el brote es mayor que en otros momentos.
De acuerdo con Garlobo, en el Combinado del Este siempre ha habido hepatitis. Lo conoció de primera mano mientras estuvo encarcelado en ese penal, en 2023, por su activismo político.
“Nunca lo han controlado, lo que pasa que ahora hay más gente y ellos no lo dicen ni lo reportan”, informó a ADN Cuba.
Refirió que la mayoría de los presos enfermos de hepatitis se encuentran en el edificio 1, aunque también los ubican en el 2 y el 3.
Garlobo añadió que la situación en la cárcel es crítica por la ausencia de medicinas y la falta de atención médica. Dijo que los presos solo acceden a los medicamentos que llevan sus familias, pero que, incluso, en ocasiones los carceleros no se los entregan.
“Hay muchas personas con muy mal estado de salud y ellos dicen que todo está bien”, comentó.
Recientemente, Ilsa Ramos, esposa del preso político Yasmany González, conocido como “Yasmany el libre”, denunció en una publicación que en el penal había un brote de hepatitis, además de otras condiciones que vulneran la salud de los internos.
“No puedo estar con mi esposo este año tampoco y me invade el temor de saberlo en peligro dentro del Combinado del Este, donde hay un brote de hepatitis, el agua cochina para tomar, humedad, comida podrida, además de golpear a los reclusos y asesinar con total impunidad”, escribió en Facebook.
La hepatitis es una inflamación del hígado, que puede ser causada por infecciones virales, el consumo excesivo de alcohol, sustancias tóxicas, enfermedades autoinmunes o medicamentos. Su origen más común son los virus de la hepatitis (A, B, C, D y E).
Especialmente la A se transmite por alimentos o agua contaminada. Las condiciones de los penales cubanos son propicias para contraer este tipo de enfermedad.
Varios reportes a lo largo de los años hablan de brotes similares.
En marzo pasado, el periodista Yosmany Mayeta reportó el fallecimiento de un recluso en Santiago de Cuba por falta de atención médica en la cárcel de Boniato.
Los familiares del reo informaron que tenía hepatitis y lo ingresaron durante un pase "porque estaba amarillo".
“El familiar dijo que en el hospital, decían que era una Hepatitis avanzada, debido a la mala alimentación de la cárcel”, escribió Mayeta.
Por otro lado, en febrero de 2024, el activista Adrián Curuneaux Stivens comunicó que en la cárcel Valle Grande, en La Habana, los internos sanos conviven con otros que tienen varias enfermedades como hepatitis, tuberculosis y escabiosis.
En 2023, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos reportó un brote de hepatitis en dos prisiones de Villa Clara y la suspensión de visitas familiares por esa razón.
También en 2002 se denunció un brote de esta enfermedad en el Combinado del Este. Ese año decenas de reclusos se habían contagiado.
En las cárceles cubanas prima la desatención médica, las enfermedades y la ausencia de tratamientos efectivos. En el mes de noviembre de 2024, el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas registró 21 denuncias de prisioneros con problemas de salud y sin atención sanitaria.
“Entre los problemas sanitarios que afectan a poblaciones penitenciarias en general, destacan los brotes de tuberculosis reportados en las prisiones Combinado del Este, 1580 (La Habana) y Boniato. En este último penal también fue denunciado un brote extendido y agudo de escabiosis, complicado por las picaduras de chinches y la falta de medicamentos”, refiere un informe reciente.