Gustavo Arcos: "El propio aparato ha buscado la manera de hacerte culpable"

La Asamblea de Cineastas Cubanos publicó el jueves en redes sociales un video de tres horas sobre la reunión celebrada el 3 de julio anterior entre integrantes del gremio en el cine 23 y 12, en La Habana.

Durante el encuentro intervinieron varios cineastas, actores y productores dentro y fuera de la isla, entre ellos, el profesor y crítico de cine Gustavo Arcos Fernández-Britto, presente en la sala.

Arcos Fernández-Britto recordó que desde 1959, con la instauración de la llamada Revolución Cubana, el poder siempre controló la manera en que las personas se expresaban.

"Controlarlo desde una narrativa oficial y esa es una narrativa que empieza a chocar, como sabemos, con artes plásticas, literatura y viene el caso del cine con la película PM y otras que vendrán después. Es un comportamiento que va en el ADN del poder en Cuba, del gobierno, de los funcionarios y de una concepción real que hay desde los años 60 con respecto a qué se entiende por el arte, cuál es la función de los artistas (…)", dijo.

De acuerdo con el académico cubano, el Estado solo debería legislar sobre la cultura contra todo aquello que se refiera a fascismo, esclavitud, promoción de racismo o de cualquier discriminación, pero no sobre el tratamiento de temas complejos de la realidad dentro del arte.

"Si las personas tratan un tema conflictivo de nuestra realidad tienen todo el derecho como ciudadanos", añadió.

En una segunda intervención, Arcos Fernández-Britto habló del miedo que tienen los artistas en el país.

"Aquí todo el mundo o muchos de los que están aquí tienen miedo en un punto; llegan hasta un límite y de pronto: yo no voy a polemizar, pertenezco al Ministerio de Cultura, me están dando dinero para esto. Al final te estás negando y el propio aparato ha buscado la manera en 60 años de hacerte culpable, de sentirte miserable, de que si cruzas la línea ya tú eres un apestado. Ya tú mismo sospechas de ti mismo y la principal respuesta de eso es que las personas para hablar tienen que hablar bajito", agregó.

En otro momento señaló: "¿Cómo concibes que después de 60 años de un cambio que debió ser para mejor las personas hablen bajito o mirar para al lado porque puede ser que haya micrófonos, una cámara, o tu teléfono esté cogido? Eso es un éxito del gobierno cubano, sentir miedo en todo momento a la hora de hablar, no decir lo que tienes que decir".

Durante la reunión, posterior al polémico encuentro que sostuvo un grupo de cineastas con autoridades del régimen cubano, se decidió la conformación de cuatro grupos de trabajo con una propuesta de integrantes, así como una propuesta para el grupo de representantes de la Asamblea.

Los grupos tratarán los temas de política cultural; censura y exclusión; leyes y decretos; y producción.

La Asamblea de Cineastas Cubanos se reunió públicamente por primera vez en junio anterior, a propósito de la exhibición, en la televisión cubana, del documental "La Habana de Fito" sin autorización de su realizador, Juan Pin Vilar.

Pocos días después se dio una reunión con el oficialismo, luego de la cual el Ministerio de Cultura del régimen dijo que "se propuso una plataforma de trabajo conjunta entre el ICAIC y los realizadores para buscar soluciones a los problemas del desarrollo de la producción audiovisual y cinematográfica".