Se deteriora salud de preso político del 11J: "Está enfermo y es inocente", dijo su madre

El preso político Adel de la Torre Hernández está sufriendo un gran deterioro de su salud en la cárcel 1580 de La Habana, denunció su madre, Anayl Hernández Collado, a la organización Cubalex.

De la Torre sufre de esquizofrenia paranoide, asma y otros padecimientos que se han agravado en el penal por falta de atención médica.

Según el reporte de dicha organización, el joven actualmente padece de dolores de cabeza constantes e intenso dolor de muelas, esto unido a una profunda depresión. Además, el año pasado perdió la visión de un ojo tras ser agredido por un oficial.

Su madre explicó que el preso político está siendo "torturado mentalmente". Durante la visita familiar del pasado 12 de diciembre, la mujer vio a su hijo "muy pálido, muy triste, deprimido y se le estaba cayendo el pelo".

Hernández Collado responsabilizó a la Seguridad del Estado y a las autoridades de la prisión 1580 por la vida de su hijo, "porque está enfermo y es inocente", agregó.

"Lo están llevando al límite y los hago responsables de su integridad física y mental", expresó la madre.

🚨 #AlertaCubalex | Anayl Hernández Collado, madre del #PresoPolítico Adel de la Torre Hernández, denuncia las condiciones inhumanas en las que su hijo permanece injustamente encarcelado.

📌 Adel, sentenciado a 7 años por las protestas del #11J, padece esquizofrenia paranoide,… pic.twitter.com/AWSUXbSDyC

— Cubalex (@CubalexDDHH) December 18, 2024

Ya en varias ocasiones se ha arreciado la represión en contra del manifestante del 11J. Las autoridades le niegan el paso a un régimen de menor severidad a pesar de sus enfermedades y también le reducen el tiempo de llamadas telefónicas.

En octubre anterior, el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas (CDPC) denunció que De la Torre Hernández había tenido ideas suicidas y que estaba siendo maltratado en el penal.

El preso político también estuvo enfermo con el virus del Oropouche.

Las denuncias sobre la situación de la Torre Hernández son alarmantes. En febrero pasado no se le dio el tratamiento que exige su condición; por el contrario, recibió constantes golpizas, denunció el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH).

“Mi hijo es esquizofrénico desde 2017. En este preciso momento ha sido golpeado por la policía de la prisión y lo metieron en un hueco. Él es cristiano, como yo. A mí me han dado tres infartos cerebrovasculares, debido a esta misma situación. Su papá era enfermo esquizofrénico, paranoico, y falleció debido a esta situación de sufrimiento”, explicó Anayl Hernández Collado al OCDH en febrero anterior.

El joven fue detenido el 11 de julio de 2021 y condenado a siete años de prisión en 2022. Cuando estaba a la espera del juicio, participó como rescatista tras la explosión del Hotel Saratoga en la capital cubana. Antes de su encarcelamiento, el joven cubano trabajaba para el Sistema Integrado de Urgencias Médicas (SIUM).

Son varios los casos de prisioneros políticos con enfermedades mentales que son víctimas de tortura en las cárceles de la isla, según reveló un reciente informe de Cubalex.

De acuerdo con el documento, las leyes y políticas penitenciarias de Cuba no cumplen con los estándares internacionales de derechos humanos. "En lugar de enfocarse en programas de tratamiento, rehabilitación y reintegración social, el sistema penal cubano adopta un enfoque punitivo que deja a estas personas sin el apoyo necesario para su recuperación. Además, no aseguran la atención continua ni la intervención especializada que exigen los estándares internacionales para garantizar la salud mental y física de las personas privadas de libertad", agrega el texto.

Entre 2022 y 2024 Cubalex documentó más de 215 actos de represión contra reclusos con discapacidad psicosocial en las prisiones cubanas. 

La organización hizo un llamado a una 'intervención urgente' de la comunidad internacional para frenar esta problemática.