Revocan pena a preso político Alfredo González Ibarra y lo envían a la cárcel
El prisionero de 27 años cumplía su sanción en el campamento Ho Chi Minh, en Mayabeque, cuando fue víctima de un robo, informó el activista Marcel Valdés.
Actualizado: August 23, 2024 8:01am
El régimen cubano revocó la pena de trabajo correccional al preso político Alfredo González Ibarra y lo trasladó a una prisión de mayor rigor.
El prisionero de 27 años cumplía su sanción en el campamento Ho Chi Minh, en Mayabeque, cuando fue víctima de un robo, informó el activista Marcel Valdés.
Según Valdés, Alfredo fue robado por un preso común llamado Richard. Al exigir la devolución de sus pertenencias, Alfredo fue atacado por Richard y otros dos presos comunes.
🚨 Régimen castrista revoca sanción a preso político.
— Marcel Valdés (@Marcel_305) August 21, 2024
El preso político Alfredo González Ibarra se encontraba en campamento (trabajo correccional con internamiento) llamado Ho Chi Minh, en la provincia Mayabeque, cumpliendo una injusta sanción de 5 años impuesta por la tiranía… pic.twitter.com/blpkhZMSpV
En medio de la riña, González Ibarra intentó denunciar la agresión al mayor López, responsable del campamento, pero este, en lugar de protegerlo, les indicó a las autoridades que lo castigaran.
“Le revocaron la sanción y lo enviaron a la prisión de Melena del Sur mientras que los tres presos comunes no enfrentaron consecuencias,” afirmó Marcel Valdés.
Este caso, según Valdés, es un ejemplo más de las tácticas de tortura física y psicológica que el régimen cubano emplea contra los presos políticos.
González Ibarra fue condenado a cinco años por participar en las protestas del 11 de julio de 2021 en San José de las Lajas, acusado de los supuestos delitos de instigación a delinquir, desórdenes públicos, atentado y daños.
Del mismo modo, en mayo pasado, autoridades penitenciarias cubanas le revocaron el régimen de menor severidad al preso político Orlando Juan Lemes Despaigne y lo regresaron a un régimen de mayor rigor en la prisión de Mar Verde.
Según denunció a Radio Martí su esposa, Dayane Murada Blanco, el supuesto motivo fue que Lemes tenía 36 paquetes de refresco en polvo y 6.000 pesos cuando regresaba de un permiso, lo cual fue interpretado por las autoridades como una violación a las normas. Le retiraron todos sus alimentos y lo trasladaron nuevamente a la cárcel de máxima severidad.
Con el retroceso a un régimen más estricto, Lemes Despaigne perdió beneficios, como los permisos para visitar brevemente a su familia y la posibilidad de trabajo remunerado en un establecimiento semiabierto.