Cuba: Registran 661 protestas en febrero 

El Observatorio Cubano de Conflictos (OCC) registró 661 protestas públicas espontáneas en Cuba durante febrero de 2024.

Esta cifra representa un incremento del 5,3% con respecto a las 626 protestas contabilizadas en enero de este año.

Según el informe del OCC llegado a nuestra redacción, las manifestaciones tuvieron lugar en las 15 provincias, pero no hubo registro de manifestaciones en el municipio especial Isla de la Juventud. La Habana fue el territorio más activo, con 257 protestas. Le siguieron las provincias de Holguín (53), Matanzas (41), Guantánamo (38) y Villa Clara (32).  

Los reclamos económicos y sociales volvieron a liderar las protestas, con 431 casos (65,2%), mientras que 230 (34,8%) estuvieron vinculadas a derechos civiles y políticos.
  
Entre los principales motivos de descontento destacan la inflación descontrolada; la escasez de alimentos, medicamentos y otros productos básicos; el incremento de la violencia social; la deficiente prestación de servicios públicos como electricidad, agua y transporte; así como los bajos salarios y las deplorables condiciones laborales.

La agudización de la crisis económica motivó 126 protestas por escasez de alimentos e inflación durante el segundo mes de 2024. El precio del dólar en el mercado informal alcanzó los 310 pesos cubanos. 

Por otro lado, el desabastecimiento de productos de la canasta básica a precios subsidiados se agravó, al punto de que este mes el régimen informó la paralización de la producción de pan por escasez de harina.

También continuaron las quejas por los frecuentes cortes del servicio eléctrico y la escasez de agua potable en varios territorios, así como el encarecimiento del transporte privado por la falta de combustible. 

Las denuncias por actos represivos fueron 157 casos, para superar las 133 protestas por este concepto contabilizadas en enero por el OCC. Esto evidencia una clara ofensiva del régimen ante la creciente inconformidad popular.

Entre los actos documentados se cuentan intimidaciones, amenazas, confinamientos y procesos judiciales contra opositores, periodistas independientes y ciudadanos críticos en redes sociales.

En las prisiones continúa el hostigamiento contra los más de 1 000 presos políticos mediante golpizas, negación de medicamentos, mala alimentación y suspensión de visitas, entre otras violaciones de derechos fundamentales.