Visibilizan caso de Chadrián Vila, otro de los presos políticos del 11J

El activista cubano Marcel Valdés, radicado en Miami, Florida, recordó este fin de semana el caso del prisionero político de 23 años Chadrián Vila, quien fuera condenado a 11 años de cárcel por participar en las protestas masivas del 11 de julio de 2021.
 
Valdés recordó los delitos por los cuales el régimen cubano condenó a Vila: “sabotaje y desorden público, todos delitos inventados porque Chadrián lo único que hizo fue manifestarse pacíficamente y gritar libertad”.
 
El cubano, que protestó en Cárdenas, en Matanzas, comenzó una huelga de hambre de 18 días al conocer su sentencia. Al decir de Valdés, en ese período Vila fue torturado por las autoridades del penal Agüica, en especial por un esbirro que responde al mote de “Luna”.

 
“Chadrián es padre de dos menores de edad, la dictadura continúa separando familias, otros niños que están lejos de su padre a causa de la injusticia y crueldad de ese sistema comunista”, concluyó Valdés, que, además, pidió darles visibilidad a los presos políticos cubanos injustamente recluidos.
 
En una entrevista del medio YucaByte los abuelos de Vila mencionaron que los abogados de la defensa “son de ellos, si no, no pueden ser abogados, porque les quitan la licencia”.
 
Valdés se ha dedicado a darles voz a varios presos de conciencia cuyos rostros no son conocidos por la ciudadanía cubana. Por ello se refirió también a Maykel Arnaldo Reyes Álvarez, sobre el que pesa una petición fiscal de 13 años de privación de libertad.
 
Reyes Álvarez, residente de Arroyo Naranjo, en La Habana, padece de asma crónica y dentro de la cárcel ha comenzado a presentar problemas de visión, para los cuales, denuncia su madre, Lourdes Álvarez, no recibe atención.
 
El manifestante fue detenido por fuerzas del régimen el 26 de julio de 2021 y desde entonces se encuentra encarcelado sin juicio. 
 
De acuerdo con el Grupo de trabajo sobre detenciones políticas Justicia 11J, hasta hoy se registran arrestos a 1771 personas por hechos relacionados con el levantamiento popular de julio de 2021. De ellas, 758 personas continúan en prisión y 706 han sido juzgadas.
 
Las sanciones más severas aplicadas por el régimen cubano han sido de entre 20 y 25 años de cárcel. En tal caso se encuentran cinco cubanos, mientras que 119 cumplen sanciones que oscilan entre los 10 y 20 años.