“Están asfixiados”: cubanos reaccionan a cambios en pasaporte anunciados por el régimen

Tras los cambios en el pasaporte cubano anunciados el martes 16 de mayo por el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex), varios activistas y periodistas señalan que son insuficientes y que se trata de una estrategia del régimen para mostrar una supuesta apertura.

Las autoridades anunciaron que el pasaporte tendrá una validez de 10 años para las personas mayores de 16 años, y de cinco para los menores. Además, se eliminará el requisito de prórroga cada dos años para ingresar y salir del país. La nueva medida entrará en vigor a partir del 1 de julio de 2023.

También disminuirá el costo de los pasaportes en los consulados en el exterior, fijando dicho arancel en 180 USD/Euros para mayores 16 años y 140 USD/Euros para menores.

Según escribió en Twitter Miguel Díaz-Canel, presidente del régimen comunista, las “medidas migratorias anunciadas (…) son resultado del diálogo permanente entre la Nación y su Emigración, y ratifican la voluntad invariable de continuar fortaleciendo los vínculos entre Cuba y sus nacionales en el exterior”.

Varias voces de la sociedad civil criticaron al régimen por intentar sacar ventaja política de la vulneración de derechos de los cubanos. José Raúl Gallego, académico y periodista cubano residente en México, respondió al gobernante que su tuit es “falso”, y que las medidas son resultado de “la pésima situación económica en que se encuentran y que necesitan turismo a toda costa”, así como de “la necesidad de mostrar ante la UE (próxima visita de Josep Borrell) y Estados Unidos que están realizando algún cambio, cuando en realidad todo sigue igual”.

Gallego mencionó una publicación de Ernesto Soberón, director general de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior, quien intenta vender las nuevas medidas como una puerta abierta a los exiliados para “incrementar su participación en la vida política, económica y social” del país.

“En este tuit queda expuesto una de las intenciones del anuncio de esta medida en estos momentos. Es falso. No existe hoy ningún tipo de participación política de los emigrados, que siguen siendo desterrados y tratados como ciudadanos de segunda”, agregó el periodista e investigador.

La periodista y activista Marta María Ramírez respondió al anuncio de la medida hecho en Twitter por el ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla: “Tenemos coterráneos que son imposibilitados de regresar a su país. Expatriados: Anamely Ramos, Omara Ruiz Urquiola, Carlos Manuel Álvarez. Desterrados: Nelson Álvarez Mairata, Jancel Moreno, Raúl Soublett. ¿Alguna noticia sobre estos cubanos y 'los castigados' con anterioridad, Minrex?”

Anamely Ramos, profesora de arte y activista, dijo a ADN Cuba que "estas medidas son fórmulas que está implementando ahora mismo la dictadura para vender una imagen de reformas y de normalización de ciertos procesos o dinámicas creadas por ellos para robarle a la población, y segundo para reforzar todo el sistema de control que llevan a cabo a través de las embajadas".

Ramos, a quien impiden arbitrariamente regresar a la isla, explica que "el control del sistema cubano no se reduce a las fronteras de Cuba, si no que están diseminadas a través de las organizaciones de solidaridad con Cuba, las embajadas, los negocios que tienen en otros países, los lobistas..."

"La verdad es que eran medidas muy escandalosas, esas cosas insólitas que el régimen impone a los ciudadanos cubanos. Ahora lo que están tratando de simular con estos cambios, es que somos un país normal, que se cumplen las leyes, que las instituciones sirven al pueblo e intentan aliviar la situación económica del pueblo, cuando todos sabemos que si algo saben hacer bien es robar y chantajear a los ciudadanos cubanos", dijo Ramos.

"Estas medidas nuevas no van a beneficiar a personas desterradas como yo o Omara Ruiz Urquiola, no va a impedir que usen el chantaje, que en vez de que los consulados sean para ayudar, sean un método de control. Los derechos fundamentales siguen siendo violados, y a discreción".

La artista y activista Salomé García Bacallao sufrió con creces la arbitrariedad del trato consular cubano: “Mis primeras acciones de activismo público contra el régimen cubano estaban relacionadas precisamente con que, durante la pandemia, quedé en situación irregular en España y cuando intenté acudir a la embajada para acceder a un vuelo de repatriación a Cuba, me dijeron que no calificaba porque vivía más tiempo fuera de Cuba que en Cuba, lo cual era totalmente falso”, dijo a ADN Cuba.

La joven estaba en España con un permiso de estudios y todavía no había permanecido en el extranjero dos años. “Cuando volví a preguntar, no había terminado el estado de emergencia, pero las fronteras de Cuba estaban abiertas, y me dijeron que para volver tenía que pagar las prórrogas que tenía pendientes”, explicó.

Eso significaba un pago de 40 euros mensuales a la embajada en España para conservar su derecho de residencia. García Bacallao lanzó una petición online que llegó a las 10 000 firmas en tres días, y promovió manifestaciones que se realizaron en embajadas de todo el mundo contra el pago de las prórrogas.

“Gracias a estas acciones, hasta el día de hoy, se suspendió el requisito del pago de estas prórrogas para regresar a Cuba. Sin embargo, en el aeropuerto, las aerolíneas pueden negarte el derecho a abordar porque no tienes las prórrogas adicionales. Esta es una solución del Minrex que estaba vigente hasta el día de hoy. Las aerolíneas podrían usar el hecho de que usted no tiene la prórroga para negarse a abordar el avión, como verifiqué personalmente en el aeropuerto de Fort Lauderdale con un boleto a Cuba con JetBlue y que finalmente cancelé”.

Sobre la actual ley, Salomé García cree que “llega muy tarde” y como “resultado de la presión que la comunidad ha ejercido en el exterior, en primer lugar, y, en segundo lugar, de la radicalización de la migración cubana. Creo que cada vez más personas se reconocen como exiliadas, que no van a volver a Cuba mientras no puedan ejercer sus derechos. Y entonces cambian estas normas para tal vez atraer a cubanos en el exterior, para invertir en Cuba, para gastar dinero”.

Salomé García señala que, “para los cubanos que participan en protestas en el extranjero frente a nuestros representantes consulares, todo el de los pasaportes es bastante complicado. Aunque es un derecho que tenemos como seres humanos, tenemos que solicitar el pasaporte a la misma autoridad que sale luego a reprimirnos, fuera de esas representaciones, para enfrentar a los exiliados cubanos”.

En España, dijo García Bacallao, ella ha tenido la experiencia de que “los cónsules que trabajan en las embajadas, se enfrentan a los cubanos que protestan. El cónsul de Barcelona me llamó personalmente, después de ver mi solicitud en línea, para interrogarme por teléfono sobre los motivos por los que estaba haciéndola. Y esas eran las mismas autoridades con las que tenía que gestionar mis documentos”.

Por su parte Nelson Álvarez Mairata, forzado al exilio en 2022, denunció en Twitter que “muchas personas, activistas y con una postura crítica sobre el sistema cubano”, tienen prohibido “entrar a la isla”.

“Ustedes, Gobierno de Cuba, violan los Derechos Humanos sistemáticamente”, acusó el activista LGBTIQ+ y comunicador independiente.

La activista y comunicadora independiente Iliana Hernández declaró a ADN Cuba que la estrategia de la dictadura es buscar una solución a la crisis económica a través de los exiliados cubanos, luego de que se le han cerrado las ayudas de sus países aliados.

“Ellos necesitan dinero para seguir en el poder y piensan que devolviendo derechos que nos quitaron a partir del 59 van a continuar en el poder. La solución es que se vayan del poder; es la única medida válida”, dijo Hernández.

Alberto Ortega Fonseca, activista y hermano del preso político Roberto Pérez Fonseca, señaló a este medio que las nuevas medidas “demuestran el nivel de asfixia que tiene la dictadura cubana y que no le ha ido como ellos pronosticaron. Yo voy a seguir con la campaña Don´t travel to Cuba [No viajes a Cuba]”.

Además de los cambios anunciados respecto al pasaporte, el funcionario del régimen cubano Ernesto Soberón aseguró en Twitter que se prorrogaba la estancia de cubanos en el exterior sin que ello conlleve la pérdida de la residencia.

“Se mantiene vigente la prórroga de estancia en el exterior, más allá de 24 meses, automática y sin costo, anunciada en marzo 2020, con el objetivo de apoyar a cubanos que se encontraban en el extranjero durante período crítico de la Covid-19”, escribió Soberón.

Esta nota, publicada originalmente el 17 de mayo, fue actualizada el 18 de mayo de 2023 para agregar los testimonios de Salomé García y Anamely Ramos.