Régimen cubano vuelve a pedir diálogo con EEUU y añora los años de Obama

El régimen cubano ha vuelto a insistir en los últimos días en un diálogo con Estados Unidos y la entrante administración Trump, aunque, como es habitual, bajo sus propios términos.

Nuevamente el castrismo echó mano de sus voceros y funcionarios para sugerir un 'acercamiento' con Washington, cuando solo falta un mes para que Donald Trump asuma la presidencia de Estados Unidos.

A propósito, el gobernante del régimen, Miguel Díaz-Canel, expresó durante la XXIV Cumbre del ALBA-TCP, celebrada en Venezuela el fin de semana, que "se ponga fin al bloqueo y se nos excluya de la mencionada lista unilateral (lista de estados patrocinadores del terrorismo) (...) El escenario que se nos presenta en las relaciones con Estados Unidos no ha sido una sorpresa para Cuba: era muy probable y veníamos preparándonos para ello".

Díaz-Canel dijo que están dispuestos "al diálogo serio y responsable, avanzar hacia una relación constructiva y civilizada, basada en la igualdad soberana, el respeto mutuo, al margen de las diferencias políticas profundas entre los gobiernos".

Los intentos de La Habana no han quedado ahí. También, el 17 de diciembre, un artículo del periódico estatal Granma, firmado por el agente de la Seguridad del Estado Raúl Antonio Capote, recordó el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países en 2014, durante la Administración Obama.

Aunque indicó que "poco o nada varió la política de Washington hacia la Isla", volvió a mencionar la 'disposición de diálogo' del régimen cubano.

"Cuba mantiene su disposición a un diálogo en el que se respeten las diferencias, con base en las leyes internacionales para la convivencia pacífica entre las naciones; sin admitir la más mínima exigencia que lacere su independencia y su soberanía", escribió Capote.

Este martes, igualmente, durante la vigésimo segunda edición de la serie de conversaciones “Cuba en la política  exterior  de Estados Unidos de América", el viceministro de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, añoró la época de Barack Obama, alegando que fue "un período breve y de beneficios para ambos países". 

Fernández de Cossio añadió que están abiertos a "sentarse con Estados Unidos en busca de una relación seria, respetuosa y que debe atenerse al respeto a los derechos soberanos de Cuba".

No obstante, activistas y opositores entrevistados por ADN Cuba con motivo del décimo aniversario del deshielo EE. UU.-Cuba, coincidieron en que el régimen cubano desaprovechó aquella oportunidad y entorpeció todo lo que pudiera significar mejoras significativas para el pueblo cubano. 

Luego del reciente triunfo de Donad Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el régimen hizo señas de querer dialogar. En esa ocasión Díaz-Canel y otros altos funcionarios de La Habana realizaron declaraciones similares.

Aunque el régimen cubano intenta mostrarse ante el mundo como abierto al diálogo y flexible, lo cierto es que son ellos quienes boicotean cualquier posibilidad de conversaciones que incluyan temas vitales como democracia y respeto a los derechos humanos. Por otra parte, el castrismo ni siquiera valora la posibilidad de escuchar a los cubanos de posiciones políticas críticas hacia el régimen. 

No obstante, esta campaña de llamados a "dialogar" con el gobierno de Estados Unidos no es la primera vez que sucede.

En 2020, tras el triunfo de Joe Biden, también el régimen ofreció 'dialogar sin renunciar al socialismo'.

"Estamos dispuestos a discutir sobre cualquier tema, lo que no estamos dispuestos a negociar es con la Revolución, el socialismo y nuestra soberanía. Los principios no estarán nunca sobre la mesa", dijo Díaz-Canel en diciembre de 2020, en una sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP).

Asimismo, en 2016, durante el primer triunfo de Trump, el régimen cubano aseguró que podría dialogar, pero con "respeto mutuo" y "sin concesiones".

"La parte cubana tiene la voluntad de avanzar en la mejora de las relaciones y la construcción de una convivencia pacífica, sin tener que hacer ninguna concesión en los principios en los que Cuba cree firmemente", declaró la entonces  directora de la Cancillería cubana para EE. UU. Josefina Vidal.

También Raúl Castro hizo llegar entonces una nota de felicitación a Trump. "El presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de la República de Cuba, Raúl Castro Ruz, envió un mensaje de felicitación al Sr. Donald J. Trump por su elección como Presidente de los Estados Unidos de América”, indica el texto publicado en la página web del Ministerio cubano de Relaciones Exteriores.

En enero de 2017, incluso, la delegación cubana fue invitada a la Ceremonia de Inauguración Presidencial del país norteamericano.

Donald Trump ganó los comicios electorales estadounidenses el pasado 5 de noviembre, imponiéndose frente a Kamala Harris, la candidata demócrata. El mandatario asumirá la presidencia el 20 de enero de 2025.

Desde su campaña y con el reciente nombramiento del senador cubanoamericano Marco Rubio como su secretario de Estado, la entrante administración ha anunciado que vienen cambios y sanciones contra el régimen de La Habana.