Crisis en Cuba: al menos 700 mil cubanos sin agua potable por apagones

Antonio Rodríguez Rodríguez, presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) del régimen cubano, confirmó a medios del oficialismo que, debido a los constantes apagones, al menos 700 mil personas no tienen agua potable de manera diaria en el país.

Rodríguez informó al medio de propaganda del castrismo, el diario Granma, que el sistema hidráulico cubano es uno de los que más se afecta con los apagones, ya que es el segundo más consumidor, detrás del sector residencial.

El funcionario del INRH insistió en que cientos de miles de cubanos en la isla no reciben el agua diariamente por cortes insesantes de electricidad en las estaciones de bombeo.

Actualmente, los grupos de respaldo energético solo cubren el 36% de las fuentes de abasto de todo el país y los problemas se agudizan porque no hay piezas de repuesto en caso de roturas.

Rodríguez añadió que la distribución de agua potable en Cuba enfrenta un gran problema: el déficit de combustible a las tecnologías de bombeo, especialmente en áreas de difícil acceso.

Según el funcionario, la falta de entrega oportuna de diésel interrumpe el suministro de agua a los centros vitales, lo que obliga a utilizar camiones cisterna destinados a la población general y prolonga los ciclos de sequía en varias comunidades del país.

Desde Cárdenas un usuario denunció que ellos llevan “días y días sin el preciado líquido, debido a los continuos apagones y cuando llega la corriente hay que esperar 1 o 2 horas a que llegue el agua”.

“Cuando empieza a llegar vuelven a quitar la luz y seguimos de nuevo sin agua, así día tras día, es como un círculo vicioso”, agregó.

“Con la cantidad de millones donados a nuestro país no hay justificación alguna para que todas esas bombas tengan una fuente de corriente eléctrica. No justifiquen más lo mal hecho y acaben de darle solución inmediata a las cosas, eso es lo que exige la población”, apuntó otro.

Además de los apagones de más de 12 horas, los cubanos tienen que soportar semanas sin agua potable y escasez de medicamentos y alimentos.