Granma arremete contra filme de Jennifer López por mostrar "una Cuba inexistente"

El periodista oficialista Julio Martínez Molina, del medio de propaganda Granma, del Partido Comunista, arremetió contra el filme “La Madre”, de la plataforma Netflix, y con su protagonista, la estrella latina Jennifer López, porque mostró “una Cuba inexistente”.

La película se rodó en 2022, en la isla española de Gran Canaria, que presume de calles coloniales, montañas, vegetación, edificios y del ambiente callejero que necesitaban los productores de Netflix para simular La Habana. Pero al oficialismo castrista no le gustó la imagen que vendieron  de la capital cubana.

Martínez Molina relató la historia del filme diciendo que “en pos de recuperar a su hija, raptada por un poderoso grupo de traficantes de armas”, el personaje de Jennifer López viaja a La Habana en compañía de un agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por su sigla en inglés).

“Es la capital cubana dibujada en el filme, el garito donde se refugian carteles de la droga y del negocio de las armas, sitio en el cual puede matarse de forma impune y en el que campean asesinos latinoamericanos”, agregó el crítico cubano.

El reportero oficialista aseguró que es “muy curioso” que las críticas al filme a nivel mundial no le dediquen “una línea al asunto” y, sin embargo, se refuerce la “tergiversación de la realidad del país”. Martínez añadió que en Cuba “no existe comercio de armas ni los traficantes encuentran su guarida”.

Para el oficialismo “esta visión de Hollywood” es “repudiable” y va a favor de la política norteamericana de “sembrar en el imaginario universal la idea de que Cuba es un Estado terrorista, otro oscuro rincón del eje del mal en cuyas calles prima el caos y la barbarie”.

El régimen teme que el gobierno norteamericano los siga ubicando en la lista de países que patrocinan el terrorismo y por ello se lanzan contra cualquiera que no los represente como la falsa e idílica isla que ellos venden al turismo.

A propósito del tema, Estados Unidos descartó, a inicios de mayo, retirar a Cuba de ese listado, pese a haber sostenido una reunión con el régimen de La Habana sobre "cooperación para enfrentar actividades terroristas".

"Estas conversaciones ocurren de forma regular. Seguimos sin tener un cambio de política en cuanto a la presencia de Cuba en la lista", expresó el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Vedant Patel, en una rueda de prensa, informó la agencia EFE.

Desde EE. UU. insistieron en que "el régimen tiene una larga trayectoria de represión contra la sociedad civil y otros factores que hacen que siga dentro de la lista" de promotor del terrorismo.