"ES HUMILLANTE LO QUE NOS HICIERON": familiares de víctimas por explosión reaccionan a ceremonia oficial
"Ni le permitieron a mi familia ponerle flores a mi hijo y mucho menos a su esposa, que pidió desesperadamente que le dejaran poner flores", narró el padre de uno de los jóvenes fallecidos
Creado: January 21, 2025 9:44am
Actualizado: January 21, 2025 12:01pm
El régimen cubano decretó un Duelo Oficial este lunes en honor a los trece fallecidos tras la explosión que se produjo en un almacén de material de guerra en Holguín el pasado 7 de enero. También organizó un acto político en la Plaza de la Revolución "Mayor General Calixto García Íñiguez", donde asistió el dictador cubano Miguel Díaz-Canel.
Tras la ceremonia, anunciada "como un justo tributo a los caídos en el cumplimiento del deber", varios familiares de los jóvenes que perdieron la vida en el suceso rompieron el silencio. Uno de ellos fue Julio César Guerrero Batista, padre de José Carlos Guerrero Gracia.
Guerrero escribió en su perfil de Facebook respecto al acto: "Una vez más me doy cuenta del desprecio que se siente por los cubanos de a pie, lo primero que hicieron fue pasarnos por un detector de metales a mi esposa, a mi hijo de 17 años y a mí, por todo el cuerpo como si fuéramos criminales sin respetar nuestro dolor".
Tras relatar la forma en que les impidieron a los demás allegados de las víctimas acercarse al lugar donde se iba a efectuar el acto, el padre denunció que "ni le permitieron a mi familia ponerle flores a mi hijo y mucho menos a su esposa, que pidió desesperadamente que le dejaran poner flores a su esposo".
Julio César Guerrero agregó que en la ceremonia, detrás de ellos, "se encontraban los invitados del FARAÓN y familia de los altos dirigentes formando un muro compacto para que ni un plebeyo pudiera pasar".
El padre del joven que cumplía con el SMO en la Unidad de Melones, donde ocurrió la explosión, concluyó diciendo que fue "HUMILLANTE LO QUE LE HICIERON A MI FAMILIA Y LAS DEMÁS FAMILIAS DE LAS VÍCTIMAS".
También Daliha González Almaguer, hermana de Frank Antonio Hidalgo Almaguer, otro de los fallecidos, confesó a ADN Cuba: "Para mí ese acto no significa nada, cuando ahora los llaman combatientes, héroes, que estaban defendiendo... si nadie nos estaba atacando. Todo fue una mala decisión tomada. Eso es lo que pienso".
Unas horas antes del acto político, la madre de otro de los jóvenes que perdió la vida en la explosión también rompió el silencio en su cuenta de Facebook y envió un contundente mensaje a la dictadura.
"Mañana los asesinos de niños de este país quieren hacer una ceremonia en contra de la voluntad de los padres, ni siquiera tuvieron el valor de buscarlos porque son unos pendejos, y ahora quieren hacer duelo nacional. Son unos asesinos", escribió Gretel María, la madre del joven Leinier Jorge Sánchez Franco, de 18 años.
La ciudadanía también criticó al dictador cubano tras anunciar que estaría en el acto orquestado por los militares para rendir tributo a las víctimas de la explosión:
"Combatientes? Al menos los soldados no habían combatido nunca… Caídos? No, sepultados por la irresponsabilidad de ustedes… Cumplimiento del deber? Habiéndoselos llevado obligados al servicio militar… Ni una sola verdad en tu post", se lee en uno de los tantos mensajes que le enviaron a Díaz-Canel a través de X.
En la nota del anuncio de los fallecimientos, publicada por el MINFAR el pasado 15 de enero, la institución aseguró que era "inaccesible el lugar del accidente" y que, en consecuencia, no "existía posibilidad alguna de vida en el lugar".
Sin embargo, señalaron que "la posible causa que provocó el suceso está asociada a una falla eléctrica provocada por un cortocircuito en el interior de la instalación".
El comunicado del MINFAR agregaba, además, que no se habían podido rescatar los cuerpos de los fallecidos "debido a la complejidad extrema que existe en el terreno producto de las explosiones".
Los familiares de los cuatro oficiales y los nueve soldados que, en contra de su voluntad, manipulaban explosivos sin la preparación ni la protección necesaria, estuvieron denunciando la inacción de las autoridades.
Aunque la muerte de los jóvenes se oficializó la semana pasada, el duelo fue programado para el lunes 20 de enero, coincidiendo con la toma de posesión del presidente Donald Trump en Estados Unidos.