Dictadura cubana tacha de "chantaje" represalias de EE.UU. a Colombia por no aceptar deportados
El dictador cubano MIguel Díaz-Canel se pronunció en apoyo a Gustavo Petro después de que la crisis entre Estados Unidos y Colombia había sido solucionada
Creado: January 27, 2025 6:39am
Actualizado: January 27, 2025 8:39am
El dictador cubano Miguel Díaz-Canel calificó este domingo de "chantaje" la amenaza de represalias comerciales y diplomáticas de EE. UU. a Colombia si el país suramericano no aceptaba los vuelos de devolución de migrantes en situación irregular.
A través de un tuit en la red social X, Díaz-Canel escribió: "Nuestro apoyo al Presidente Gustavo Petro en su digna defensa de los derechos de los colombianos y su respuesta al tratamiento discriminatorio y al chantaje con el que se pretende presionar a su pueblo y a Nuestra América".
Sin embargo, el mensaje del régimen cubano fue publicado cuando ya la Casa Blanca anunciaba que Colombia había aceptado "todos los términos del presidente Trump".
Poco antes, el presidente Gustavo Petro había publicado un arrebatado y desafiante mensaje en la red social X en el que invocaba desde el califato de Córdoba hasta Bolívar y se nombraba el último de los coroneles Buendía de García Márquez, todo ello para finalmente ceder a las exigencias norteamericanas.
Según la declaración de la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, el domingo por la noche Petro habría concedido, además, la "aceptación irrestricta de todos los extranjeros ilegales de Colombia regresados de Estados Unidos, incluso en aviones militares estadounidenses, sin limitación ni demora".
A cambio, los aranceles y sanciones previamente redactados bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) -que habrían impuesto aranceles del 25% sobre todos los productos colombianos entrantes y luego serían aumentados al 50% en una semana-, "quedarán en reserva y no se firmarán", salvo que Colombia incumpla el acuerdo.
Sin embargo, Leavitt no fue explícita sobre si las restricciones de visas y los controles reforzados en aduanas y fronteras seguirán en efecto hasta que el primer vuelo con deportados colombianos llegue con éxito al país.
Colombia, por su parte, un país considerado históricamente como aliado de EE. UU. en el hemisferio, calificó de "superado el impasse" por medio de un comunicado leído por su canciller, Luis Gilberto Murillo, también el domingo en la noche.
El diplomático colombiano reafirmó que seguirán recibiendo a los colombianos deportados de Estados Unidos "garantizándoles las condiciones dignas como ciudadanos sujetos de derechos".
Comunicado oficial pic.twitter.com/VlTD49lsQs
— Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) January 27, 2025
La crisis diplomática de Colombia con Estados Unidos fue causada por la decisión del mandatario Gustavo Petro de no permitir el ingreso de dos aviones con ciudadanos deportados de EE. UU. mientras esas personas no recibieran un trato "digno". La negativa de Petro ocurrió con los aviones ya en el aire, luego de haber autorizado previamente su recepción.
Entre las medidas que la Casa Blanca anunció tras la negativa, estaban también restricciones de viaje y revocación de visados para funcionarios del Gobierno de Petro y su partido, duras sanciones económicas al país e "inspecciones" a los ciudadanos y mercancías colombianas que llegasen a Estados Unidos.
El secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, ordenó, por su parte, "la suspensión inmediata de la emisión de visas en la sección consular de la embajada de Estados Unidos en Bogotá" a partir de este lunes, medida que perjudicaría a miles de personas que tenía su cita agendada desde hace meses e incluso años.
Petro, como medida de reciprocidad, indicó al ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Carlos Reyes, "elevar los aranceles de importaciones desde los EE.UU. en un 25 %", así como buscar otros destinos para los productos nacionales.
Todo estosucedió en cuestión de horas, este domingo 26 de enero.
Tras dar por "resuelto" el dilema, la Casa Blanca señaló que estos eventos dejan claro que "América vuelve a ser respetada".
El presidente Trump reiteró, asimismo, su compromiso de proteger la soberanía estadounidense y expresó que espera que todas las naciones cooperen plenamente en la deportación de ciudadanos que residen ilegalmente en Estados Unidos.
Dos aviones de carga C-17 de la Fuerza Aérea que transportaban a migrantes expulsados de Estados Unidos aterrizaron el pasado viernes en Guatemala. Ese mismo día, Honduras recibió dos vuelos con un total de 193 personas deportadas.
De igual forma, Gloria Chávez, jefa del sector del Valle del Río Grande (RGV) en la frontera sur de Estados Unidos, reveló que en los últimos dos días los agentes de la Patrulla Fronteriza han repatriado a más de 735 inmigrantes irregulares por vía terrestre.
Estas personas, procedentes de países como Cuba, Honduras, Venezuela, Haití, México, Nicaragua, Guatemala y El Salvador, habían ingresado ilegalmente a territorio estadounidense, según refirió en X la fuente, que no desglosó la cantidad de migrantes deportados por cada nacionalidad.
NON-STOP REPATRIATIONS IN RGV! In the last two days, #RGV Border Patrol agents have repatriated over 735 illegal aliens from countries such as Cuba, Honduras, Venezuela, Haiti, Mexico, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, and Honduras that had entered illegally into the #USA. pic.twitter.com/gDpCmfT69H
— Chief Patrol Agent Gloria I. Chavez (@USBPChiefRGV) January 25, 2025
Colombia aceptó 475 vuelos de deportación de Estados Unidos entre 2020 y 2024, en quinto lugar detrás de Guatemala, Honduras, México y El Salvador, según Witness at the Border, un grupo de defensa que rastrea los datos de vuelos. Sólo en 2024, unos 124 vuelos de deportación tocaron suelo colombiano.
El año pasado Colombia y otros países también comenzaron a aceptar vuelos de deportación financiados por Estados Unidos desde Panamá.
Cuba recibió hasta diciembre de 2024 a 1.312 deportados desde diferentes países, informaron medios oficiales. De esas cifras, el dictador cubano no dio detalles en su "apoyo" reciente a Colombia.