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Reiteran amenaza a periodista Carlos Michael Morales: o trabaja con el Estado o va a prisión

Según explicó el opositor a ADN Cuba, el presidente del Tribunal, Sandro Rodríguez, le preguntó si ya tenía un contrato laboral con el Estado, a lo que este respondió que no y rechazó las ofertas que le hicieron

Actualizado: August 21, 2024 12:25pm

El periodista Carlos Michael Morales acudió a una citación este miércoles en el Tribunal Municipal de Caibarién, en Villa Clara, donde las autoridades del régimen le reiteraron la amenaza de que debe trabajar para el Estado o, de lo contrario, irá a prisión.

Según explicó el opositor a ADN Cuba, el presidente del Tribunal, Sandro Rodríguez, le preguntó si ya tenía un contrato laboral con el Estado, a lo que este respondió que no y rechazó las ofertas que le hicieron.

"Les dije que el estudio médico que me estoy haciendo aún no ha culminado porque el médico del consultorio se encuentra de vacaciones y él es el que debe mirar los resultados de análisis, para luego remitirme a un especialista", añadió Morales, seriamente afectado de salud tras las dos huelgas que realizó en los últimos meses.

Ante ello, presidente del Tribunal Provincial le reiteró al activista que tiene que trabajar con el Estado de forma obligatoria y que, si no lo hace, será encarcelado nuevamente.

"A pesar de mi precario estado de salud se me sigue amenazando con ser encarcelado y atrás de esto está la policía política del régimen", añadió Morales.

El pasado 22 de julio, Morales fue condenado a ocho meses de prisión domiciliaria tras un juicio celebrado en la ciudad de Santa Clara. 

El opositor estaba detenido desde principios de mayo, acusado del supuesto delito de desobediencia, tras meses de hostigamiento.

Este arresto se produjo poco después de que el periodista fuera liberado en marzo, tras cumplir una sentencia de tres años por su cobertura de las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021 en Caibarién, provincia de Villa Clara.

Luego de dos huelgas de hambre, el opositor bajó mucho de peso y su salud se deterioró.

Desde su salida de la cárcel, a finales de julio, el régimen busca obligarlo a trabajar en el sector estatal, a lo que él se niega.