Meteorología de Cuba prevé una temporada ciclónica de “normal a poco activa”

Especialistas del Instituto de Meteorología de Cuba (Insmet) pronostican una próxima temporada ciclónica en el Caribe, de “normal a poco activa”, con la probable formación de 11 ciclones tropicales y cinco huracanes.

La temporada ciclónica comenzará el venidero 1.º de junio y se extenderá hasta el 30 de noviembre. Según el Insmet, Cuba tiene posibilidad de que al menos un huracán la afecte de manera directa este año.

El pronóstico del oficialismo precisa que de los 11 ciclones tropicales pronosticados, siete pudieran formarse en el océano Atlántico, dos en el mar Caribe y dos en el golfo de México. Este sería la primera previsión oficial y el 1.º de agosto proximo, volverían a actualizarla.

“La probabilidad de formación e intensificación de al menos un huracán en el Caribe es de un 45 %, y la perspectiva para la penetración en el Caribe de un huracán de procedencia atlántica es moderada (40 %)”, agregaron.

A mediados de abril, la Universidad Estatal de Colorado (CSU por sus siglas en inglés) publicó su pronóstico de la temporada de huracanes en el Atlántico para 2023. Este equipo de investigadores predijo que habría 13 tormentas con nombre.

"De estas 13 tormentas, los investigadores esperan que seis se conviertan en huracanes, y que por lo menos dos alcancen una categoría mayor (Saffir/Simpson categoría 3-4-5) con vientos sostenidos de hasta más de 111 millas por hora (178 km/h)", detalló la CSU en un comunicado.

Este pronóstico dista un poco del entregado recientemente por los meteorólogos cubanos, aunque sí coincide en que las cifras están por debajo del promedio típico de la temporada en el Atlántico, que es de “14 tormentas con nombre, siete huracanes y tres huracanes mayores”. Por ello consideran que será una temporada de “normal a baja”.

La CSU también ofrecerá nuevas actualizaciones para el 1 de junio, el 6 de julio y el 3 de agosto y avisan que los pronósticos pudieran variar.

En 2022, la Insmet pronosticó una temporada de ciclones “muy activa” en el Atlántico, con hasta nueve potenciales huracanes, y dio un 85 % de probabilidades de que al menos uno afectara a la isla. En septiembre de ese año el Huracán Ian afectó varios municipios de Pinar del Río y casi un año después, miles de afectados siguen sin techo en ese territorio.

Recientemente, autoridades gubernamentales reconocieron ante el presidente designado de Cuba, Miguel Díaz-Canel, que no tienen fecha para el arribo de “elementos” para techos, algo que ha retrasado la “recuperación” de las viviendas afectadas por el huracán Ian.

Esta es prácticamente la misma situación que tienen los damnificados de eventos meteorológicos anteriores a lo largo de todo el país.