Tercer apagón masivo en Cuba en una semana: esta vez por una “avería”

Otro apagón masivo que afecta a varias provincias de Cuba fue confirmado este martes por la Unión Eléctrica (UNE), el tercero que ocurre en menos de diez días.

“En estos momentos se encuentran sin servicio eléctrico las provincias desde Cienfuegos hasta Guantánamo por una avería en las líneas de 220 kV [kilovoltios] Matanzas-Santa Clara y Matanzas-Cienfuegos”, publicó la UNE en sus páginas oficiales en redes.

Según la empresa estatal, “se comenzó el proceso de restauración” y “se investigan las causas de la avería”.

José Raúl Gallego, periodista y académico cubano residente en México, declaró que “la dictadura cubana no puede siquiera garantizar mínimamente los servicios básicos. Han convertido ese país en un armatoste obsoleto, al límite de su capacidad, que cada remiendo se traduce en una nueva rotura”.

El primero de estos incidentes se reportó el pasado día 13 de febrero, cuando el “incendio de un cañaveral” afectó una línea de alta tensión, según las autoridades. Ese día se desconectó durante más de cuatro horas el sistema eléctrico desde Ciego de Ávila a Guantánamo, con afectaciones en siete de las provincias cubanas.

El sábado 18 de febrero, otro apagón masivo dejó sin electricidad a gran parte del país. Seis horas demoró la UNE en restablecer el Sistema Eléctrico Nacional, luego de que una falla atribuida a un “error humano” colapsara el servicio desde Matanzas hasta Guantánamo.

“No tiene arreglo [el país] manteniendo lo que está. Hay que cambiarlo, hacerlo nuevo. Pero para eso, primero hay que sacar a los que lo impiden”, agregó José Raúl Gallego al dar su opinión en redes sociales.

En medio de este escenario, el régimen de La Habana anunció el pasado jueves nuevos cortes programados de electricidad en Cuba con un promedio de tres horas diarias de apagones hasta mayo, por “mantenimientos” en las centrales termoeléctricas (CTE).

El Ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, dijo en la televisión estatal que los arreglos en las termoeléctricas tienen como objetivo “disminuir los cortes por averías” y “garantizar el servicio durante el próximo verano”.

Los prolongados apagones durante todo el 2022 acrecentaron el descontento popular con el régimen, lo que condujo a decenas de protestas en varias provincias del país, que fueron más fuertes y frecuentes entre agosto y octubre.

En los últimos meses las autoridades de Cuba apuntalaron su precario sistema eléctrico alquilando siete centrales flotantes, la última de las cuales arribó a inicios de febrero a la bahía de La Habana. El Ministerio de Energía y Minas informó en Twitter que la nueva patana aportaría 240 megavatios (MW) al sistema.

La prensa oficialista admitió, a propósito de la nueva patana, que “si bien [el CEN] presenta una situación mejor a la de los meses previos, aún sufre no pocas tensiones”. La estrategia de rentar centrales flotantes es criticada por el impacto ambiental que podrían tener, así como por ser una solución temporal y costosa.

Jorge Piñón, director del Programa de Energía para Latinoamérica y el Caribe de la Universidad de Texas, declaró en julio de 2022 a Radio Televisión Martí: “No pueden [las autoridades cubanas] seguir con esta política de curitas, de tratar con las plantas generadoras termoeléctricas que alquilaron ahora de Turquía... Es decir, hace falta una recapitalización estructural” del sistema.