Régimen defiende calidad del café normado pese a críticas de consumidores

En días recientes las redes sociales se han vuelto a llenar de quejas de consumidores cubanos por la mala calidad del café "Hola", vendido a la población por el régimen.

Las críticas no solo se refieren al mal sabor y a la textura, sino que también incluyen explosiones de cafeteras. No obstante, funcionarios del régimen cubano han salido, otra vez, en su defensa. 

El producto, que forma parte del consumo diario de muchos cubanos, ha sido calificado como "inaceptable" debido a su sabor amargo y a los problemas de salud que ocasiona.

Entre los testimonios que se leen en una publicación del periodista independiente José Luis Tan Estrada, la ciudadana Irene López reportó que el 27 de diciembre sufrió la explosión de su cafetera al preparar el café. Por su parte, el consumidor Lunes Fernández advirtió sobre las características del producto, señalando que "huele mal", en lugar de tener el aroma característico del café.

Al registro de incidentes se suma el testimonio de Denisdrey Camacho Rodríguez, quien también reportó una situación similar de explosión con el café "Hola". Ante la preocupación expresada por el periodista José Luis Tan Estrada, Camacho Rodríguez confirmó que afortunadamente no se registraron daños personales, ya que no había nadie cerca de la cafetera en el momento del suceso.

Yamel Hermida Delgado también confirmó haber recibido múltiples reportes similares de otras personas sobre accidentes con este producto, "Así es. Confirmo porque varias personas me han dicho".

De igual modo, Kenia Romero compartió en su perfil de Facebook su experiencia, cuestionando la calidad del café de la bodega porque la cafetera estuvo a punto de explotarle.  "Quisiera saber un día no muy lejano de que está hecho el café de la bodega, será cartón o aserrín?", cuestionó.

Según un informe publicado por el medio oficialista Girón, la Empresa Torrefactora de Café de Matanzas respondió a las recientes críticas sobre la calidad del café distribuido en la red minorista con destino a la canasta familiar normada, asegurando que el producto cumple con los parámetros establecidos para su comercialización.

Taymí Pereira López, especialista principal de calidad de la entidad, detalló a Girón los "rigurosos controles de calidad" implementados: "El producto se somete a un exhaustivo proceso de análisis, incluyendo el control de la granulometría, que realizamos manualmente en el laboratorio mediante un tamiz para determinar el tamaño de las partículas del café molido". Según la especialista, las producciones de diciembre cumplen con las normas establecidas.

No obstante, la entidad tuvo que reconocer que, a pesar de contar con un sistema efectivo de control de calidad, enfrentan dos retos principales: la calidad de la materia prima y la obsolescencia de los equipos de la planta

Varios usuarios reaccionaron a la publicación de Girón en Facebook expresando su desacuerdo con lo afirmado sobre la calidad del café distribuido en las bodegas.

Entre los comentarios, Juana Mari Rodríguez Sánchez aseguró: "Ese no es el café que vino a la bodega, la envoltura es un [nylon] sin nombre, no tiene sabor y cuando lo pasas por un colador solo queda una cuchara de algo fino el resto queda como otros elementos desconocidos. Si ese café que vino a la bodega pasó por los controles de calidad es [porque] los controles no tienen paladar".

En su caso, Yolanda Andrés dijo sobre los supuestos parámetros: "Nadie habla del grueso del grano ni la colada, es el olor y sabor, si no tiene café en su proporción, no es café, diga quien diga, es una vergüenza después de tanto tiempo sin ofertar el producto se aparezcan con esto, da dolor de estómago, esa prueba no la hizo el laboratorio, nadie lo tomó".

También Ernesto Medina comentó: "Esa técnica o especialista de calidad no sé de qué café estará hablando, por lo menos el que dieron en la bodega no sé qué semillas o sustrato utilizaron para tostar y envasar, ni color, ni olor a café tiene y el sabor... Después de tantos meses sin dar el café de la 'canasta básica' se aparecen con esto".

En octubre de 2023 varios spirituanos cuestionaron la calidad del café, incluso, remitieron fotos a la redacción del periódico local oficialista Escambray donde se mostraban partículas obtenidas, después de cernirlo, que, al parecer, eran residuos de la cáscara del chícharo, que no se trituró correctamente en el proceso de molinado.

Cuestionado sobre el tema de las explosiones, el director de la torrefactora de Sancti Spíritus negó que esto ocurriera debido a la calidad del producto:

“Aunque nuestra tecnología es obsoleta, somos capaces de garantizar las elaboraciones requeridas, pero la calidad es algo que seguimos de cerca. Se hacen varios muestreos durante el proceso, que incluyen las pruebas de explosión en cafeteras criollas, que son las más usadas por los consumidores y todas resultan positivas, solo presentamos problemas con el envase, al estar utilizando el polietileno en lugar del polipropileno, que es el material ideal. Eso obliga a realizar constantes adecuaciones a la tecnología para poder cumplir con la producción”, aseguró el director de la UEB al medio oficialista Escambray.

Cuba, otrora país destacado en la producción de café, está lejos de alcanzar sus mejores cosechas históricas debido a las trabas que impone un sistema estatal centralizado. A esto se suma que los mejores granos se destinan a la exportación, mientras que para el consumo de la población queda el remanente, que luego se procesa mezclado con "sucedáneos".