Denuncian acoso policial a vendedor de alimentos en Pinar del Río

El activista Julio Góngora denunció este lunes que la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) de la ciudad de Pinar del Río, al occidente de Cuba, acosa a un vendedor de viandas y hortalizas en medio de la escasez general de alimentos.

“Para que vean a qué se dedican [los policías] en Cuba: un muchacho que lo único que se dedica es a vender viandas, y vienen aquí a decomisarle [la mercancía]”, denunció Góngora en un video enviado a ADN Cuba.

El incidente ocurrió en el populoso reparto conocido como “El Calero”, en la ciudad capital de la provincia de Pinar de Río. El video filmado por Góngora muestra un auto patrullero abordando al vendedor.

Según Góngora, el joven simplemente estaba “ayudando al pueblo” al comerciar los alimentos, pues no hay comida en los establecimientos estatales. “Quieren decomisarle todo. Estas son las cosas de la 'continuidad' [del régimen], las cosas de la supuesta revolución. El pueblo sumido en la miseria y ellos encargándose de quitarle las cosas al que vende”, dijo el activista.

Mientras esto sucedía en Pinar del Río, trascendió que en la provincia de Villa Clara (centro de Cuba), el campesino Raúl Morales denunciaba la pérdida de su cosecha de tomates, porque autoridades del régimen no los recogieron.

“¿A quién representan los organismos políticos que no se han pronunciado ante los tomates que se echaron a perder por su responsabilidad? Los culpo, porque había una orientación de la ANAP Nacional de que no se podían perder”, señaló el lunes el campesino en un post de Facebook.

Morales compartió un video que muestra los tomates podridos. “Esto es lo que ha dejado de recibir el pueblo”, añadió el agricultor.

La falta de alimentos de todo tipo golpea la mesa familiar del cubano, con más fuerza en los últimos tres años. La grave escasez e ineficacia del gobierno para impulsar la producción y el comercio ha llevado a la población a una situación límite.

Expertos, como el Doctor en Economía Pedro Monreal, han señalado la responsabilidad de las autoridades en la “inseguridad alimentaria” que existe en Cuba.

“La estadística oficial cubana confirma la continuación de una estructura muy deformada de la inversión, con servicios empresariales, inmobiliaria y alquiler (incluye turismo) mayor que la inversión combinada en industria, agricultura, y suministro de electricidad, gas y agua”, advirtió en noviembre último Monreal, especialista del Programa de Ciencias Sociales y Humanas de la Unesco.

Entre enero y septiembre de 2022, según los datos de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI), en el sector de “Servicios empresariales, actividad inmobiliaria y de alquiler” se invirtieron 15 832,7 millones de pesos cubanos; mientras que en “Agricultura, ganadería y silvicultura”, apenas se invirtieron poco más de 1218 millones.

De acuerdo con un análisis del experto publicado en Twitter, “es preocupante que, en medio de una situación de inseguridad alimentaria, el peso relativo de la inversión agropecuaria se mantenga estancado a un nivel muy bajo de 2,6%, 13 veces menor que el peso relativo de la inversión en servicios empresariales e inmobiliaria (33,5%)”.