ONU condena trabajo forzado impuesto a presos políticos en cárceles cubanas
"El estudio evidencia la alarmante situación del trabajo forzoso en los centros penitenciarios en Cuba, revelando una preocupante desconexión entre la normativa legal y la cruel realidad vivida por los reclusos"
Actualizado: Wed, 08/28/2024 - 14:01
El Relator Especial sobre las Formas Contemporáneas de la Esclavitud de Naciones Unidas, Sr. Tomoya Obokata, condenó el trabajo forzado impuesto a los presos políticos en las cárceles cubanas.
Según informó este miércoles Prisoners Defenders (PD), el informe sobre este flagelo, presentado por la organización en junio pasado, fue incluido en el reporte al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
"El estudio evidencia la alarmante situación del trabajo forzoso en los centros penitenciarios en Cuba, revelando una preocupante desconexión entre la normativa legal y la cruel realidad vivida por los reclusos, especialmente dolorosa cuando se trata de presos de conciencia y políticos", señala el texto.
De acuerdo con el presidente de PD, Javier Larrondo, "el relator ha indicado en su informe que la existencia de leyes y reglamentos nacionales que permite el trabajo obligatorio por expresar opiniones políticas o participar en huelgas también sigue siendo motivo de preocupación en Cuba".
#Urgente: 🇺🇳@ONU_es condena el #TrabajoForzoso impuesto en prisión a los Presos Políticos en #Cuba
— Prisoners Defenders (@PrisonersDFNdrs) August 28, 2024
La producción de carbón vegetal de Marabú y el corte de caña de la zafra azucarera son dos de los negocios del régimen cubano ejercidos bajo esta forma contemporánea de #esclavitud… pic.twitter.com/fsVOwkggkB
También, en mayo anterior, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) denunció ante el Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos la violación de los derechos laborales a centenares de personas privadas de libertad en Cuba, quienes son sometidas a trabajo forzoso, sobre todo en la producción de carbón.
La denuncia del OCDH hace énfasis en la elaboración de carbón vegetal de marabú, destinado a la exportación, que se desarrolla “en situación inhumana”.
El documento señala que el trabajo de los prisioneros “se consuma en muchos casos mediante vicio o contra la voluntad del reo bajo formas claras de coacción/intimidación, debido a la especial vulnerabilidad y condiciones de subordinación fáctica y legal de los reclusos al sistema penitenciario; o porque no tienen opción distinta para esquivar las precarias condiciones de vida e inseguridad existentes en las prisiones que la aceptación del trabajo en el carbón.”
Provincias como Matanzas, Villa Clara, Cienfuegos, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila y Camagüey destacan por concentrar el mayor número de prácticas de trabajo forzado o semiesclavitud, según el resumen de testimonios y datos compilados.