María Victoria confirma detención de su hermano Alejandro Gil y negó vínculos con sus negocios “sucios”

La comunicadora y expresentadora del programa de la TV Cubana de “De la Gran Escena”, María Victoria Gil, radicada hace años en España, rompió el silencio tras la detención bajo cargos de corrupción de su hermano, el exministro de Economía del régimen, Alejandro Gil.

En conversación con el youtuber Darwin Santana, Vicky, como se le conoce a la presentadora, se desligó de los negocios “sucios y turbios” de su hermano, quien fue defenestrado de su cargo a inicios de febrero.

"Hablan una cantidad de cosas de mí, Darwin. Por el amor de Dios, qué daño me ha hecho mi hermano tan grande", precisó.

La comunicadora, radicada en la isla canaria de Tenerife, negó que ella fuera “testaferro de Alejandro Gil” o se hubiese “beneficiado de algún negocio turbio, sucio o de algún desfalco”.

María Victoria Gil, quien pasó una semana en La Habana recientemente, confirmó que su hermano menor, Alejandro, está detenido e incomunicado en la capital cubana, junto a su esposa, Gina María González García.

"No tienen móviles, no hay manera de comunicarse con ellos. Mi sobrina sí está en la casa, pero en prisión domiciliaria, también sin móvil. Me comuniqué nada más que con mi sobrino, el hijo de mi hermano, que es un infeliz que vive aparte de ellos con su esposa y su niño, lejos, en Marianao, y tampoco sabe nada de ellos", reveló.

Vicky recordó que lleva una década viviendo en España, país del que ya tiene la nacionalidad. Pero, para no perder su casa en Cuba, la mujer viaja cada dos años a la isla. En marzo, dijo, emprendió su viaje, con un pasaje comprado con mucha antelación para obtener un precio más económico.

“La prueba más grande de que yo no tengo nada que ver con la corrupción de mi hermano es esa, que estuve en Cuba”, agregó.

En su perfil de Facebook la comunicadora insistió en su inocencia y recalcó que ella y su hijo eran “ciudadanos españoles, somos personas honestas y dignas que vivimos de nuestro trabajo diario”.

“Aquí estoy, con la frente alta porque no he cometido delito alguno, porque jamás me he lucrado de la corrupción. A mi pueblo que me abrazó y me aplaudió en las calles, mi agradecimiento ETERNO”, sentenció.

La semana pasada el régimen cubano anunció que Alejandro Gil estaba siendo investigado por el Ministerio del Interior (Minint), acusado de cometer “graves errores” en el desempeño de sus anteriores cargos.

Una escueta nota oficial del presidente designado, Miguel Díaz-Canel, publicada en los medios de prensa oficiales, advertía que Gil Hernández había reconocido “graves imputaciones” y que renunciaba a ser miembro del Comité Central del Partido y Diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.

El pasado 2 de febrero el régimen anunció la destitución de Gil Hernández y de otros ministros. La destitución de Gil fue propuesta por Díaz-Canel y aprobada por el Consejo de Estado y el Buró Político del Comité Central del PCC.