Amenazan a preso político Roberto Pérez Fonseca con traslado a prisión lejana

El jefe de la cárcel de Quivicán, Mayor Durisbel Álvarez Pérez, amenazó al preso político del 11J Roberto Pérez Fonseca con trasladarlo a una prisión 'muy lejana', denunció su hermano Alberto Fonseca en redes sociales.

La amenaza obedeció a que el opositor denunció que le negaron el miércoles pasado la asistencia religiosa con el obispo auxiliar Eloy Ricardo Domínguez Martínez, quien visitó el penal.

"Roberto me llamó y me dijo que el jefe de la prisión le había dicho que lo iban a trasladar de prisión, porque él todo lo denuncia y él respondió que mientras le siguieran violando sus derechos iba a seguir denunciando", expresó su madre, Liset Fonseca, a ADN Cuba este martes.

Por su parte, el activista Alberto Fonseca comentó en su perfil de X que "no es la primera vez que amenazan a mi hermano por denunciar las injusticias que comenten contra él".

🚨El Mayor Durisbel Álvarez Pérez jefe de la cárcel de Quivican amenazo a mi hermano con que lo iba a trasladar a una prisión muy lejana, por denunciar que no le permitieron la asistencia religiosa con el monseñor Eloy, no es la primera vez que amenazan a mi hermano por denunciar… https://t.co/NwgsD1zuek

— Albert Fonse 💪🇨🇦🇨🇺 (@albertfonse11j) January 28, 2025

"A mi hermano le negaron esta asistencia por años y ha tenido problemas con los guardias de la prisión por tener rosarios y la Biblia. No es la primera vez que no le permiten reunirse con el monseñor Eloy", contó el hermano la semana anterior.

La madre del preso político también explicó a ADN Cuba días atrás que al activista "no lo sacaron" de su celda durante la visita del religioso a Quivicán.

"Él se molestó porque sabe que son acciones de la Seguridad del Estado, y cuando ellos no quieren que se hable sobre un tema, no lo sacan", explicó Fonseca.

Los familiares y presos políticos cubanos permanecen alertas en relación con el proceso de excarcelaciones, que se paralizó el 21 de enero, a solo seis días de iniciado.

Dicho proceso, que el régimen presentó como una decisión "unilateral y soberana" en el espíritu del Jubileo, fue detenido tras la toma de posesión de Donald Trump como nuevo presidente de los Estados Unidos y el posterior anuncio de que se revocaba la salida de Cuba de la lista de estados patrocinadores del terrorismo. No obstante, desde el fin de semana anterior a que se anunciara esta decisión, ya el régimen cubano había hecho correr el rumor entre familiares y prisioneros políticos de que las excarcelaciones serían paralizadas.

Sin embargo, el propio obispo de La Habana, Eloy Ricardo Domínguez Martínez, aseguró a la agencia Reuters que “la liberación de prisioneros en Cuba continuará”.

Hasta la fecha no hay información sobre nuevas excarcelaciones. Según organizaciones independientes, solo han sido excarcelados alrededor de 170 prisioneros políticos, en su gran mayoría, bajo figuras de libertad condicional o licencia extrapenal.

Roberto Pérez Fonseca, manifestante de las protestas antigubernamentales de julio de 2021 en San José de las Lajas, provincia de Mayabeque, fue condenado a diez años de cárcel. 

Durante su reclusión ha mantenido una actitud frontal contra el régimen, lo que le ha valido fuertes torturas y un deterioro notable de su salud.