Alertan sobre aumento de inseguridad y crímenes en Cuba

La organización independiente Observatorio Cubano de Auditoría Ciudadana (OCAC) alertó esta semana, a través de un informe semestral, del incremento de la inseguridad pública y la violencia criminal en la isla en lo que va de 2023.

Según la información,hay un aumento significativo de crímenes y delitos, entre los que se incluyen robos, asesinatos, asaltos y agresiones. Las provincias más afectadas son, hasta el momento, La Habana, Villa Clara y Guantánamo.

Esa entidad señala que en el primer trimestre de 2023 se verificaron 98 reportes de diferentes delitos: 42 robos, 33 asesinatos, 17 asaltos y seis de “otro tipo”, mientras que en el segundo trimestre de 2023 se registraron 189 reportes de delitos, por lo que la tendencia es al alza.

La OCAC califica de “muy relevante” el aumento de la criminalidad de un trimestre a otro. Como se aprecia, se duplicaron los delitos (de 98 a 189), para un 92% de crecimiento. De estos, los robos crecieron en un 83% y los asesinatos en un 43%.

“El mayor incremento ocurrió en el mes de junio, lo que pudiera indicar que se avecina una escalada de hechos delictivos en los próximos meses”, refieren.

La organización independiente explica que, aunque estas cifras pueden resultar bajas respecto a las que ofrece la oficialidad en diferentes naciones de América Latina, lo cierto es que el aumento de la criminalidad en Cuba suena alarmante.

“Hasta hace poco, el régimen parecía capaz de garantizar el “orden público” por medio de políticas sociales que contenían los niveles de pobreza y desigualdad en marcos tolerables (…) dedicadas al sostenimiento del “orden público” frente a los delitos “no-políticos”. Gritar en la calle contra el gobierno garantiza un rápido despliegue policial. Gritar pidiendo auxilio no”, añaden.

La OCAC también llama la atención de que estas cifras pueden ser “mucho mayores”, pues pocas víctimas de delitos comunican la situación a la policía. Además de los delitos mencionados, también va en aumento la inseguridad alimentaria, sanitaria y energética.

“Abordar la inseguridad pública no puede limitarse a medidas punitivas. Es necesario un enfoque integral que aborde las causas subyacentes, como la falta de inversión en necesidades básicas, no solo en alimentación y salud, sino también en recursos para la policía criminalística”, añaden.

Finalmente, la entidad aboga porque los recursos del estado “deberían ser redirigidos hacia el desarrollo y el bienestar social en lugar de beneficiar a una oligarquía”.

La OCAC nació en marzo de este año dentro de la isla y, según su idea fundacional, se trata de una nueva iniciativa de la sociedad civil independiente para intentar fiscalizar los negocios del régimen.