Anuncian interrupción temporal en uso de todas las tarjetas magnéticas en Cuba

En la medianoche de este lunes 27 de enero todas las tarjetas de banda magnética que circulan en Cuba (REDSA, AIS, Clásica, Visa, MasterCard, Union Pay, MIR) no podrán operar, según ha informado la Financiera Cimex S.A. (FINCIMEX) en su perfil de Facebook.

FINCIMEX asegura que el sistema parará únicamente por seis horas, y que el propósito es "aplicar actualizaciones tecnológicas imprescindibles en el procesamiento de tarjetas. La financiera dice que "los especialistas trabajarán para su reactivación a las 06:00 hrs del propio día, de manera tal que se encuentre disponible para el horario de mayor demanda operacional".

La financiera aclara asimismo en su publicación en la red social Facebook que "las afectaciones no incluirán a los servicentros en pesos cubanos (CUP); y que se mantienen como alternativas las pasarelas de pagos nacionales (Transfermóvil y En Zona) y el uso del efectivo en aquellos lugares donde proceda su utilización".

FINCIMEX forma parte del conglomerado militar GAESA, y controla las tarjetas magnéticas, las remesas internacionales y los pagos electrónicos en la isla. Durante la primera administración de Donald Trump, en noviembre de 2017, FINCIMEX figuró en la denominada Lista Restringida de Cuba (CRL), que preveía sanciones para entidades asociadas a los militares cubanos.

A fines del 2022 el proyecto Inventario revelaba posibles conexiones entre FINCIMEX  y la casi desconocida Orbit S.A., que comenzaría a operar las remesas provenientes de Estados Unidos hacia Cuba, de conjunto con la compañía radicada en Miami Va-Cuba INC.

El 31 de enero de 2022 el Banco Central de Cuba (BCC) emitió una licencia a favor de Orbit S.A. para la tramitación de las remesas, con lo cual se convertía en la tercera empresa con este tipo de autorización en el país. La precedieron Servicios de Pago Red S.A. (REDSA) y Fincimex, S.A.

Con esta nueva licencia y sin encontrarse entre las empresas sancionadas por Estados Unidos, Orbit S.A. fue la opción del régimen para, una vez restituido el envío de remesas, continuar haciendo negocios.