Se deteriora salud de preso político: "Los guardias del penal no le hacen caso"
Ronald García Sánchez fue condenado a 14 años de cárcel por el supuesto delito de sedición
Actualizado: Mon, 08/14/2023 - 08:09
La salud del preso político del 11J Ronald García Sánchez se va deteriorando a diario, con fuertes dolores en una rodilla que le afectan el caminar, denunció el activista Marcel Valdés el sábado.
Según la denuncia, publicada en redes sociales, en la enfermería de la prisión Combinado del Este -donde se encuentra recluido- le dijeron que tenía que hacer un tratamiento con dos medicamentos (Metocarbamol y Metamizol) que aún no han sido proporcionados por las autoridades del penal.
Los sanitarios de la prisión también le indicaron que, de no mejorar, debía ser trasladado a un hospital.
"Ronald lleva días pidiendo su tratamiento y no se lo acaban de dar, el dolor continúa aumentando y los guardias del penal no le hacen caso", añadió Valdés.
La madre del recluso, Damaris Sánchez, confirmó a ADN Cuba que "lo atendieron en el hospital del Combinado pero no le han dado el medicamento".
Sánchez no recibe llamadas de su hijo desde el 11 de agosto y espera que la llame este lunes para saber cómo sigue de sus padecimientos.
Ronald García Sánchez fue condenado a 14 años de cárcel por el supuesto delito de sedición tras manifestarse en las protestas antigubernamentales de julio de 2021, específicamente en el municipio Diez de Octubre, en La Habana.
Según los registros de la organización Justicia 11J, inicialmente recibió una sentencia de 20 años de privación de libertad, la cual fue rebajada en casación.
El joven de 30 años es natural de Arroyo Naranjo.
Cada vez son más frecuentes las denuncias sobre falta de atención médica a presos políticos y la agudización de sus padecimientos en prisión.
Precisamente el domingo trascendió que el activista cubano Alejandro Garlobo, también recluido en el Combinado del Este, convulsionó recientemente a causa de fiebres altas, reportó Radio Televisión Martí.
La activista Diasniurka Salcedo contó al medio de prensa que Garlobo no ha recibido la atención médica necesaria en la cárcel y que, además, tiene problemas para orinar y defecar.
