Régimen anuncia nueva política para la importación de carros en Cuba
Las nuevas medidas entrarán en vigor este 1 de enero de 2025
Actualizado: December 31, 2024 10:50am
Eduardo Rodríguez Dávila, ministro de Transporte del régimen cubano, anunció este 30 de diciembre una nueva política para la importación de carros, además de nuevas medidas para el traspaso de ese tipo de propiedad.
En su perfil de Facebook, Rodríguez explicó que, tras un amplio proceso de “conciliación” con numerosos organismos de la Administración Central del régimen, a partir de este 1 de enero de 2025 entrará en vigor la actualización de la política de comercialización de vehículos en Cuba.
Rodríguez Dávila había prometido con anterioridad que estas nuevas medidas quedarían establecidas, a más tardar en noviembre, pero, según él, “por su alta complejidad y la necesidad de establecer múltiples consultas, no fue posible cumplir con esos plazos”.
Las medidas se publicaron este lunes íntegramente en la Gaceta Oficial Ordinaria de la República, número 128, correspondiente al 30 de diciembre de 2024.
Las nuevas normas incluyen: el Decreto Ley 101/24, el Decreto 119/24, las Resoluciones 226/24 del Ministerio de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, 66/24 del Ministerio de Comercio Interior, 397, 298, 399, 400 y 401/24 del Ministerio de Finanzas y Precios, 189/24 del Ministerio del Transporte, así como las Resoluciones 364 y 365/24 de la Aduana General de la República.
Entre los principales cambios introducidos, según la oficialidad, están los precios de los vehículos comercializados en moneda libremente convertible (MLC), que no variarán según el comprador, ya sea una persona jurídica o natural.
Rodríguez aseguró que, para las personas naturales, “estos precios serán más bajos que los actuales”.
También se permitirá la transmisión de la propiedad de vehículos entre personas naturales y jurídicas, excepto en el caso de entidades estatales o con participación estatal, así como diplomáticas, las cuales se rigen por normativas específicas independientes.
Igualmente, los vehículos disponibles en el mercado cubano, incluidos aquellos que finalicen su explotación en la renta y estén en buen estado técnico, se destinarán, en moneda nacional (CUP), a atender prioridades estatales y sociales previstas en el plan de la economía, reposición del seguro, taxis y estímulos para trabajadores de diferentes sectores.
Además, el régimen impondrá un impuesto “especial por venta” que alcanzará hasta el 35 % del valor total de venta en MLC para vehículos de gama alta y sin gravamen para vehículos eléctricos ensamblados en Cuba.
El Ministro indicó que se estableció un límite de hasta seis vehículos que pueden ser adquiridos por una persona natural o jurídica en un período de cinco años.
Según el régimen, “la actualización de esta política facilitará el acceso de las personas a diferentes alternativas para satisfacer sus necesidades de movilidad”.
Cuba vive una crisis en el transporte público, algo que Eduardo Rodríguez calificó en un programa de la presidencia castrista como uno de “sus peores momentos”.
En abril de este año el 52% de las rutas de las empresas provinciales de Transporte se encontraban paralizadas.
La situación era particularmente crítica en provincias como Camagüey, Granma, Villa Clara, Ciego de Ávila, Holguín, Matanzas y Artemisa.
A diferencia de la mayoría de los países, donde la compraventa de vehículos es un acto normal entre privados, en el caso de Cuba el Estado regula totalmente este tipo de operaciones.
Para la mayoría de los cubanos, tener un vehículo automotor constituye un lujo, debido a los altos precios y prohibiciones impuestos por el régimen.