Régimen producirá 6 mil motos eléctricas para venta en divisas

Autoridades del régimen cubano informaron a través de sus medios de propaganda, que la Empresa Ciclos Minerva de Santa Clara, al centro de la isla, producirá al menos seis mil motos eléctricas o “motorinas”, para su venta en las tiendas de Moneda Libremente Convertible (MLC).

Eliel Pérez Pérez, director general de esta fábrica, explicó que la misma está laborando en la actualidad con menos del 50% de su capacidad, muy lejos de las demandas institucionales que tiene el país.

No obstante, en medio de la crisis económica y social, los trabajadores de Ciclos Minerva se proponen producir seis mil motos eléctricas, 18 450 bicicletas mecánicas, 1000 triciclos eléctricos, 1000 sillas de ruedas y 2800 módulos de estantes para almacenes, destinados estos últimos al sector turístico.

Según Pérez, el principal problema de su empresa es que no genera el dinero suficiente para importar la materia prima y rentar los fletes que desde China traen los materiales a la isla. También, hay una demora de dos meses en el traslado debido a la enorme distancia geográfica. El directivo contó que la industria nacional no es capaz de ofertar insumos locales y, por tanto, es imposible abaratar los costes.

El especialista refirió que por estos días, la empresa “socialista” solo explota el 20% de su capacidad ante la ausencia de materias primas, pues las deudas y la falta de dinero han hecho que los cargamentos salieran con retraso de China. Se espera que en junio arranque esta producción pactada de motorinas, bicicletas mecánicas y triciclos.

Mientras eso sucede, la empresa ha tenido que reubicar a sus más de 300 trabajadores en funciones alejadas de sus especialidades como “guardias, labores de limpieza, producción de bienes a partir de la materia prima existente en almacenes y otras funciones”.

Pérez Pérez detalló que sus empleados ganan, entre utilidades y salarios, unos 12 mil pesos cubanos al mes, poco más de 90 dólares, al cambio actual de la banca cubana. Una cifra que es muy superior al salario promedio de la mayoría de los cubanos, pero que no contenta al directivo.