La Iglesia Católica en Cuba envía mensaje navideño al pueblo

La Conferencia de Obispos Católicos de Cuba publicó este 18 de diciembre su tradicional mensaje de Navidad para 2024, titulado "Nos visitará el sol que nace de lo alto", una comunicación centrada en aspectos religiosos.

El mensaje episcopal  gira, principalmente, en torno a temas religiosos como la oración y la celebración del próximo Año Jubilar, acompañado de reflexiones sobre la esperanza cristiana.

Los obispos reiteran su llamado a la oración por Cuba. Ya en abril pasado habían invitado a la familia cubana a orar. 

"Renovamos ahora ese llamado, siendo conscientes de que la oración tiene el poder de transformar los corazones, las realidades de muerte, y volvernos a Dios. Perseveremos en la oración por Cuba, no dejemos de hacerlo por nada. La oración es el servicio propio y más eficaz que la Iglesia puede ofrecer a nuestro pueblo, junto a todas las iniciativas caritativas y solidarias que generan esperanza, en medio de las dificultades que afrontamos”, menciona lo publicado.

Sin embargo, el mensaje evita abordar directamente la profunda crisis socioeconómica que atraviesa la isla y mantiene distancia de los problemas que enfrentan los cubanos, como la escasez crítica de alimentos, medicinas y otros productos básicos, la inflación, los cortes eléctricos prolongados y el éxodo masivo de la población.

Los obispos se limitan a hacer una vaga referencia a las "difíciles realidades" que afrontan las familias cubanas:

“Ya cercana la Navidad, como pastores del pueblo de Dios, queremos hacer llegar a las familias cubanas un mensaje de cercanía y aliento antes las difíciles realidades que, demasiadas de ellas, tienen que afrontar cada día”.

En otro momento de la carta también dicen que: "En nuestros corazones hay un anhelo profundo de amor y paz, de perdón y reconciliación, de verdad y justicia, de libertad y prosperidad."

Al respecto, el activista por la libertad religiosa Osvaldo Gallardo declaró a ADN Cuba que el mensaje de los obispos, “si bien toca la realidad de algún modo, no insiste en ella. 

"Esta Navidad que está acercándose va a ser la Navidad más difícil, más dura para el pueblo cubano en los últimos 65 años de historia. Parecía hace dos años que iba a ser la Navidad más difícil, parecía el año pasado que iba a ser la más difícil, pero no. Cada vez la realidad es más oscura y es más sombría para el pueblo cubano en todo el año y especialmente en la Navidad”, expresó.

Galardo reconoció que “este es un mensaje que es verdadero en el sentido [de] que Cristo nace, nace para todos, pero es muy difícil celebrar la Navidad en Cuba, hoy con esperanza y con optimismo frente a esta realidad".

Este mensaje por la Navidad sería el primero que emite la nueva directiva de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, a decir de Gallardo.

En noviembre pasado los obispos cubanos eligieron a Arturo González Amador, obispo de Santa Clara, como presidente; a Juan Gabriel Díaz Ruiz, obispo de Matanzas, como vicepresidente, y a Eloy Ricardo Domínguez Martínez, obispo auxiliar de La Habana, como secretario general. 

Unos meses antes, el 16 de septiembre, el Papa Francisco recibió a la anterior presidencia de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba.

En la audiencia, los obispos cubanos informaron sobre la escasez y el alto costo de productos básicos que afectan al pueblo y a la Iglesia. 

En ese momento la Iglesia estaba atravesando una difícil situación por el éxodo de sacerdotes, el cierre de comunidades religiosas y las dificultades para atender pastoralmente a comunidades rurales por la falta de combustible y el mal estado de los vehículos. 

Para atravesar la crisis se lanzó una campaña en España denominada "La Iglesia en Cuba, donde nada es imposible".

Los religiosos cubanos han desempeñado labores de asistencia social y humanitaria ante la crisis extendida que vive el pueblo cubano. Varias iglesias de la isla desarrollan programas para asistir a los más necesitados y algunos sacerdotes han levantado su voz a pesar de las represalias.