Díaz-Canel: política hacia Cuba es "perversa y genocida", pero "veníamos preparándonos" para enfrentar a Trump
Veintidós días después, el gobierno cubano reaccionó este miércoles a la reciente victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Actualizado: November 27, 2024 10:39pm
Veintidós días después, el gobierno cubano reaccionó este miércoles a la reciente victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
En una declaración transmitida por la televisión estatal y las redes sociales oficiales, el gobernante Miguel Díaz-Canel afirmó que el resultado “no era una sorpresa” y aseguró que el país se encuentra preparado para enfrentar las consecuencias.
Las declaraciones de Díaz-Canel se produjeron en un encuentro informal, pero cuidadosamente planificado, con residentes del municipio de Lajas, en la provincia de Cienfuegos. Este tipo de visitas a las provincias, alejadas de la atención de medios internacionales, se ha convertido en una estrategia habitual para Diaz-Canel.
“Para nosotros, los resultados de esas elecciones no son nuevos. Era un escenario probable y veníamos preparándonos para enfrentarlo”, dijo.
En su intervención, el gobernante dirigió duras críticas a la política de sanciones de Estados Unidos hacia la isla, calificándola de “perversa y genocida”. Recordó que durante el primer mandato de Trump se intensificaron las restricciones contra Cuba, y lamentó que su sucesor, Joe Biden, haya mantenido “la misma posición de hostilidad”.
Díaz-Canel también atribuyó la prolongada crisis económica y social que atraviesa el país a las sanciones estadounidenses. Según el mandatario, estas medidas han agravado problemas como los apagones, la escasez de alimentos y medicinas, y la contracción de la economía. “Es verdad que hemos sufrido”, reconoció, aunque insistió en que el modelo socialista cubano no cederá ante las presiones externas.
También reiteró su disposición a dialogar con Washington, pero bajo condiciones claras: “Estamos dispuestos a dialogar en igualdad de condiciones y sin imposiciones, pero no aceptaremos injerencias”.
Aunque Díaz-Canel culpa del desastre en el que viven los cubanos a las sanciones de Estados Unidos, una estrategia rancia que el castrismo ha usado interminablemente, para justificar su total incompetencia, la realidad es que el único efecto que tiene el embargo es que imposibilita que la dictadura cubana acceda al sistema bancario estadounidense y a sus créditos.
Estados Unidos es uno de los socios comerciales más importantes para la isla comunista. El Observatorio de Complejidad Económica - OEC World, destaca en datos de hasta el 2022 que Estados Unidos es uno de los socios potenciales en la importación de productos a la isla, al ubicarse en el tercer puesto, con alrededor de 341 millones de dólares, tras España ($812M), y China ($404M). Las exportaciones totales de Estados Unidos, de productos que entran dentro de la Ley de Reforma de Sanciones Comerciales y Mejora de las Exportaciones (TSREEA) -una de las que regula el vínculo comercial entre países-, desde las primeras entregas en diciembre de 2001 hasta la actualidad, superan los 7 mil 557 millones de dólares.
Las exportaciones de productos alimenticios y materias primas agrícolas de los Estados Unidos hacia suelo cubano, solo en septiembre de 2024 fueron de 31 millones 150 mil 492 dólares, en comparación con los 20 millones 317 mil 573 dólares en septiembre de 2023, y los 38 millones 167 mil 679 dólares en septiembre de 2022, revela otro texto del US-Cuba Trade adn Economic Council.
Otros productos exportados desde EE. UU. a la nación caribeña, en septiembre de 2024 y a pesar del "embargo", son semillas de frijol para siembra, semillas de pimiento para siembra, hígados de animales, adhesivos, artículos de cemento , artículos de porcelana o loza y ventiladores.
Aunque esas cifras millonarias de importaciones a Cuba hoy son públicas, el régimen reitera que "no se pueden importar metales, ni automóviles, ni barras de chocolate y mucho más. Sin embargo, para el período de enero de 2024 a septiembre de 2024, las exportaciones de vehículos usados a Cuba fueron de 45 millones 458 mil 544 dólares y las exportaciones de vehículos nuevos desde EE.UU. a la isla fueron de unos 4 millones 566 mil 28 dólares, cita US-Cuba Trade adn Economic Council.
Habría que recordar otros datos, como que el café cubano que está disponible en todo Estados Unidos, llega a través de un acuerdo firmado en 2016 entre Nespresso USA Inc., con sede en Nueva York; una subsidiaria de Nestlé Nespresso SA, con sede en Lausana, Suiza; TechnoServe, con sede en Arlington, Virginia; y Cubaexport, operada por el régimen de La Habana, bajo el auspicio del Ministerio de Comercio Exterior de la República de Cuba.
US-Cuba Trade and Economic Council revela la lista completa de los productos que se han importado este año desde Estados Unidos a Cuba, a través de relaciones comerciales oficiales, dejando a un lado los contratos adquiridos por las nuevas formas de gestión en la isla como las PYMES.
El producto interno bruto (PIB) de la isla se contrajo un 1,9 % en 2023, según cifras oficiales, y las perspectivas para 2024 no son optimistas. El Ejecutivo ya ha anticipado que no espera crecimiento económico este año, un dato que confirma la dificultad de revertir una crisis que afecta tanto a las finanzas públicas como a la vida diaria de los ciudadanos.
La grave situación económica ha catalizado un descontento social visible en fenómenos inéditos en Cuba, como las protestas masivas de los últimos años y el mayor éxodo migratorio en décadas. Cada vez más cubanos buscan abandonar la isla en busca de mejores oportunidades, reflejando una pérdida de confianza en la capacidad del Gobierno para superar la crisis.
La victoria de Trump marca el inicio de un período de incertidumbre para las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Si bien Díaz-Canel insiste en que la isla está preparada para cualquier escenario, el endurecimiento de las políticas hacia La Habana durante el primer mandato de Trump sugiere que los próximos años podrían traer más desafíos para la nación caribeña.