Seguridad del Estado del régimen interrogó a joven que se disfrazó de nazi

El joven cubano Josué Forcelledo, quien el pasado fin de semana se disfrazó de nazi en una celebración de Halloween en el Maxim Rock, fue interrogado este martes 31 de octubre por presuntos agentes de la Seguridad del Estado (SE) del régimen.

Según contó el propio Forcelledo al medio independiente CubaNet, la reunión ocurrió en la estación de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) de Güines, provincia de Mayabeque. Allí fue cuestionado, por más de una hora, por tres oficiales que se identificaron como agentes de la SE.

Forcelledo, de 23 años, precisó que los oficiales “no lo amenazaron”, aunque indagaron si este tenía “ideas fascistas” y le pidieron el disfraz, porque pensaban que era un traje original.

“Me pidieron el disfraz porque creían que era un uniforme original de la Alemania nazi, pero les expliqué que era un disfraz que confeccioné con mi propia ropa”, contó.

El joven, que estudia y trabaja al mismo tiempo en Cuba, no quiso dar más detalles sobre el interrogatorio porque los agentes de la SE le advirtieron que no comentara nada, pues el tema era un “asunto oficial”. Tampoco abundó sobre por qué utilizó un disfraz de nazi, entre tantas opciones.

Esta semana, autoridades del Instituto de la Música del régimen cubano clausuraron la sede del Centro Cultural Maxim Rock, en La Habana, tras la polémica desatada por el premio concedido al disfraz de nazi en la fiesta de Halloween.

Según un comunicado de prensa difundido en redes sociales, en la noche del sábado 28 de octubre se realizó en el Centro Cultural Maxim Rock de la capital cubana una fiesta de Halloween que incluía un baile de disfraces, en la que resultó premiado el disfraz de un militar nazifascista.

“De manera inmediata, el hecho despertó la indignación de varias personas que manifestaron su repudio a tan deleznable suceso (…) dada la gravedad del hecho y la evidencia de la incapacidad de la institución cultural para preverlo, se tomó la decisión de cerrar, de manera inmediata, el Centro Cultural Maxim Rock, hasta tanto se esclarezcan los hechos”, señalaron.

La entidad aseguró que se realizarían “los análisis correspondientes” y se tomarían las medidas disciplinarias con cada uno de los responsables del suceso y añadió que estas festividades de Halloween en centro culturales cubanos violan las directivas del régimen y son una muestra de “los peligros de la colonización cultural”.

“Incidentes lamentables como este (…) vulneran la moral y los principios (…) hieren la sensibilidad ciudadana antifascista, antirracista y antisionista, merecen todo nuesto repudio y recibirán la más enérgica respuesta del sistema institucional de la Cultura”, aseguraron.