Régimen amenaza con decomisar autos de transportistas cubanos que suban tarifas

El primer ministro del régimen cubano, Manuel Marrero Cruz, amenazó en la TV nacional, durante una reunión del Consejo de Ministros, a los transportistas privados que suban las tarifas establecidas.

“Hay que quitar la licencia, y si es reiterado y si procede y así lo deciden los tribunales del sistema de justicia hasta los vehículos, pero no pueden permitirse esos atropellos y esos incrementos de precios que no se justifican a partir de la situación actual del combustible”, dijo.

El funcionario comunista señaló que, aunque era cierto que el combustible estaba escaso y se habían incrementado los precios por parte de su gobierno, “esos incrementos de precios” no tenían justificación.

Marrero Cruz insistió en que tenían que reunirse “con todos los actores económicos, en este caso los transportistas, ya sean estatales o privados, y dejar claro cuáles son los precios establecidos y exigir”.

“Y el que viole esos precios hay que tomar con todo el rigor y según lo que esté establecido, las medidas que correspondan", advirtió.

Multitud de usuarios en redes sociales expresaron su escepticismo ante esta advertencia del régimen, opinando que el gobierno no logrará controlar efectivamente los precios. Entre las razones que argumentan se encuentra la falta de un sistema de inspección eficiente capaz de frenar el alza de precios.

“No creo detengan los precios. Existen antecedentes. Además, ahora hay alternativas en transporte de carga y taxis "directos" aun sin regular y potencialmente más rentables. Cuando se pierdan los boteros se disiparán las medidas coercitivas”, opinó un cubano en la red social X.

Esta semana, Yunier de la Rosa Hernández, director general de Transporte de La Habana, informó que más de la mitad de los ómnibus que deben prestar servicios en la capital cubana están sin funcionar por “diversas razones”.

Según el medio de propaganda comunista, el diario Granma, la capital solo tiene disponibles en estos momentos 252 guaguas de las 561 que existen para la explotación.

Rosa Hernández añadió que, debido a estas “complejidades”, los residentes en la capital cubana tienen que esperar hasta cuatro horas en las paradas de ómnibus para trasladarse a sus centros laborales u hogares.

Desde la oficialidad reconocen que, ante este panorama, los habaneros han tenido que acudir a la transportación privada, que ha subido los precios de los tramos en los últimos días.