Más de 11 mil fosas desbordadas en Cuba

En la actualidad hay más de 11 mil fosas en vertimiento pendientes de limpieza en toda Cuba.

La información fue dada ayer por José Antonio Hernández Álvarez, presidente de la Organización Superior de Dirección Empresarial "Agua y Saneamiento", durante las comisiones de trabajo previas al cuarto período ordinario de sesiones de la X Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular

También los directivos del Instituto Nacional de Recursos Hidraúlicos se refirieron a otros problemas estructurales que atentan contra el derecho al agua de los ciudadanos cubanos y repercuten negativamente en las condiciones epidemiológicas del país. Uno de los más graves es la falta de agua, que afecta a decenas de miles de personas en el país, así como los extendidos salideros en la red hidráulica, que no se han podido reparar por falta de combustible, cemento y asfalto. 

En Cuba abundan las viviendas que no están conectadas a la red de alcantarillados, por lo que dependen de fosas para almacenar líquidos y residuos. La limpieza de estos depósitos, que corresponde a empresas estatales, es un problema de larga data que afecta considerablemente la calidad de estas personas y contribuye a la proliferación de enfermedades transmitidas por vectores como el dengue, el Oropouche y la leptospirosis.

Según un artículo publicado por ADN Cuba en el 2020, vecinos de La Habana denunciaron el colapso de las redes sanitarias, lo que provocó inundaciones de aguas negras en sus hogares. Residentes de la Avenida 63, No. 10017, en Marianao, La Habana, denunciaron la existencia de dos fosas sépticas reventadas en su cuadra con más de un mes de anterioridad. Esta situación generó un fuerte hedor y puso en riesgo la salud de los vecinos, expuestos a contraer leptospirosis, hepatitis o dengue, entre otras enfermedades. Pero, a pesar de múltiples reportes a las autoridades, la situación no mostró mejoras.

En 2022, en la provincia de Las Tunas se reportó una compleja situación sanitaria en torno al manejo de fosas sépticas, donde aproximadamente 40,000 fosas se mantenían activas. Martha, una jubilada del reparto Fernando Betancourt, comentó al Periódico 26 haber desarrollado una rutina de colocar palanganas bajo el fregadero para manejar el desbordamiento de su fosa.

También en ese año el medio oficialista Escambray reportó la proliferación de criaderos de mosquitos, en Sancti Spíritus, especialmente en fosas sépticas desbordadas. Esto creó condiciones ideales para la propagación del dengue, trasnmitido por el mosquito Aedes aegypti.

El pasado mes de abril, reporteros de ADN Cuba mostraron una fosa desbordada por más de tres meses en Centro Habana, frente a una escuela. 

En octubre de 2024, el Ministerio de Salud Pública (Minsap) de Cuba informó que se habían registrado más de 17.000 pacientes con casos sospechosos de dengue en lo que iba de año, con un grupo considerable de pacientes ingresados en salas de terapia intensiva.

En relación con el virus del oropouche -cuya presencia se había confirmado a finales de mayo-, indicó que circulaba en las 15 provincias del país. A finales de septiembre, las autoridades sanitarias habían reconocido cerca de 12.000 casos sospechosos de esta enfermedad.

Las condiciones tropicales de calor y las intensas lluvias de la temporada, sumados los problemas sanitarios que afronta el país, inciden en la proliferación de dichas enfermedades. El desbordamiento de las fosas y los salideros en la red hidráulica, se une a estos factores para agravar la situación.