Senadores se oponen a procesamiento de visas de no inmigrante en La Habana
De acuerdo con los políticos, esta iniciativa "es otra medida que esta administración ha tomado para apaciguar a la dictadura cubana"
Actualizado: Fri, 09/06/2024 - 11:09
Los senadores estadounidenses Marco Rubio, Ted Cruz y Rick Scott enviaron una carta al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, para manifestar su oposición a que se tramiten visas de no inmigrante en La Habana.
De acuerdo con los políticos, esta iniciativa "es otra medida que esta administración ha tomado para apaciguar a la dictadura cubana".
"En lugar de obligar a la dictadura cubana a poner fin a sus abusos contra los derechos humanos y llevar la democracia a la isla, la administración Biden-Harris solo ha buscado oportunidades para pacificar al régimen y reparar las relaciones diplomáticas. No vemos ninguna otra razón para ampliar las NIV a los individuos cubanos y ninguna justificación de por qué hacerlo sirve a los intereses de los Estados Unidos”, se expone en la misiva.
Los senadores también enviaron varias preguntas a Blinken sobre los supuestos beneficios que traería esta medida para EE. UU. y advirtieron, además, que estas visas no deben ser otorgadas a personas que tengan vínculos con el régimen.
En su más reciente movida para apaciguar al régimen cubano, la Administración Biden-Harris ha permitido que la dictadura de Díaz-Canel se beneficie de visas para no inmigrantes.
— Senator Marco Rubio (@SenMarcoRubio) September 5, 2024
Le envíe una carta al @SecBlinken preguntando cómo estas visas benefician el interés de EE.UU.…
La reacción de los políticos se produjo luego de que la Embajada de EE. UU. en La Habana anunciara que comenzaba a procesar visados de no inmigrante en la capital cubana a partir del 19 de agosto.
Un vocero del Departamento de Estado declaró a ADN Cuba que "nos complace que la Embajada ahora tenga capacidad de personal para ofrecer estas citas adicionales para satisfacer la demanda. Puede encontrar más información sobre los servicios consulares en la Embajada de Estados Unidos en La Habana en su sitio web".
Con esta medida, ya los cubanos no tendrán que viajar a terceros países para obtener visados de intercambio cultural, religiosos, académicos o de estudios.
La sede diplomática confirmó la noticia en sus redes oficiales señalando que amplían "sus servicios de visas para incluir ciertas categorías de visas de trabajo temporal y programas de intercambio", lo cual no incluye visas de negocio B-1 ni de turismo B-2.
A partir del 19 de agosto los ciudadanos cubanos con peticiones de trabajo temporal aprobadas por los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de EE. UU. (USCIS) y los participantes en programas de intercambio con un Certificado de Elegibilidad para el Estatus de Visitante de Intercambio, pueden programar una entrevista de visa en la Embajada de La Habana.
Anteriormente, los cubanos tenían que viajar para estas entrevistas a Guyana, Trinidad y Tobago o Nicaragua.
🌟 Información Consular Importante🌟
— Embajada de los Estados Unidos en Cuba (@USEmbCuba) August 14, 2024
La Embajada de los Estados Unidos en La Habana está ampliando sus servicios de visas para incluir ciertas categorías de visas de trabajo temporal y programas de intercambio. ¡Ojo! Esto NO incluye las visas de negocio B-1 y de turismo B-2.
A… pic.twitter.com/XNLuOrnnBy
Las visas que se procesarán en la isla son: Visa H para trabajadores temporales o aprendices, Visa J para visitantes de intercambio, Visa L para transferencias dentro de una misma empresa, Visa O para trabajadores con habilidades o logros extraordinarios, Visa P para atletas, artistas y animadores, Visa Q para participantes de programas de intercambio cultural internacional y Visa R para miembros de una denominación religiosa que realizan trabajos religiosos.
Asimismo, aclararon que los cubanos aún deberán viajar a otra Embajada o consulado de EE. UU. fuera del país para entrevistas rutinarias de visas B1 y B2.
Un alto funcionario del Departamento de Estado declaró a Martí Noticias que esta nueva medida se debe al incremento de personal diplomático estadounidense en La Habana.