Denuncian violaciones de derechos humanos contra los presos políticos Juvier Jiménez y Leonel Tristá
Las condiciones de los campamentos donde están internados estos manifestantes son críticas, de acuerdo con el periodista Carlos Michael Morales
Actualizado: January 8, 2025 8:34am
Los presos políticos del 11J Juvier Jiménez Gómez y Leonel Tristá García denunciaron violaciones a sus derechos humanos en los campamentos de trabajo forzado donde se encuentran recluidos en Villa Clara, de acuerdo con información del Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH).
Entre noviembre y diciembre últimos, las autoridades del campamento de Remedios, en Villa Clara, dejaron de pagar más de tres mil pesos cubanos, en concepto de salario, a Jiménez.
“Debido a ello, tuvo que realizar una protesta contundente”, informó el OCDH.
Por su parte, a Leonel Tristá García le han pospuesto en varias ocasiones el pase para visitar a su familia.
De acuerdo con el OCDH, al reo, recluido en el campamento “El Yabú”, le correspondía un pase en diciembre, pero este fue pospuesto para el 6 de enero, día en que tampoco obtuvo el beneficio carcelario. Ahora tiene planificado el pase para el 13 de enero.
“Leonel Tristán García está convencido [de] que estas son medidas represivas en su contra debido a la actitud contestataria que ha mantenido siempre en prisión”, comentó el exprisionero político y periodista Carlos Michael Morales para el OCDH.
Los prisioneros políticos del #11JCuba Leonel Trista y Juviel Jimenez denuncian medidas represivas en su contra, por parte de las autoridades carcelarias.#SOSCuba #LibertadParaLosPresosPoliticosCuba #Cuba pic.twitter.com/6A7eNs63TO
— Observatorio Cubano de Derechos Humanos (@observacuba) January 6, 2025
Michael Morales contó a ADN Cuba que los campamentos donde están internados estos manifestantes son horribles debido a “las malas condiciones higiénicas, el hacinamiento y la pésima alimentación. En esas condiciones son obligados a trabajar y lo que les pagan por concepto de salario es una miseria”.
Asimismo, precisó que los presos políticos suelen ser revocados a un régimen de mayor severidad por “cualquier insignificancia”.
Ambos presos políticos fueron condenados por manifestarse en julio de 2021. Jiménez cumple una condena de cinco años por los supuestos delitos de desacato, atentado y desórdenes públicos, mientras que Tristá García fue sancionado a ocho años por los mismos delitos.
Durante su reclusión, estos reos han enfrentado falta de atención médica y malos tratos.
De acuerdo con el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas, en diciembre de 2023 Juvier llevaba meses con una llaga en el labio inferior y manchas blancas en la piel, pero las autoridades del campamento le negaban la asistencia médica.
Por su parte, Tristá García ha sido objeto de presiones por parte de la Seguridad del Estado para que colabore como delator. En octubre de 2024 un oficial identificado como “Abel” le ofreció adelantar su libertad condicional a cambio de que trabajara para la policía política. Ante su negativa, fue amenazado con represalias.
Un mes después, en la prisión Alambrada, ubicada en Manacas, el primer teniente Kadil Hernández lo agredió después de que Tristá le pidiera que dejara de ofenderlo por su postura política.
Tras la golpiza, las autoridades se negaron a trasladarlo al puesto médico y, en cambio, lo enviaron a una celda de confinamiento sin agua. A raíz de esto, Tristá inició una huelga de hambre reclamando atención médica y denunciando los abusos.