Skip to main content

Preso político Andy García Lorenzo decaído y con mareos tras 12 días de huelga de hambre

El preso político Andy García Lorenzo cumple 12 días en huelga de hambre en la prisión Guamajal, en Villa Clara.

Image
Andy García Lorenzo
Facebook | Andy García Lorenzo

Actualizado: December 9, 2024 1:46pm

El preso político Andy García Lorenzo cumple 12 días en huelga de hambre en la prisión Guamajal, en Villa Clara.

El manifestante del 11J se encuentra decaído, con mareos y con la presión arterial ligeramente baja, informó su madre, Tahirí Lorenzo Prado, a ADN Cuba este lunes.

De acuerdo con la familia, esta nueva protesta comenzó porque las autoridades de la prisión le quitaron documentos personales, como cartas familiares.

El pasado jueves, sus familiares tuvieron la visita mensual y conocieron que se había declarado en huelga de hambre.

Desde entonces, la vivienda de la familia de García Lorenzo, en Santa Clara, está llena de carteles pidiendo su liberación.

La requisa de objetos personales en las cárceles de la isla contra presos políticos es sistemática. En días recientes también trascendieron denuncias de requisas a las presas políticas Sissi Abascal y Saily Navarro en la prisión La Bellotex, en Matanzas.

Esta no es la primera vez que García Lorenzo acude a la huelga de hambre como forma de hacer valer sus derechos. El 19 de octubre de 2021, junto a otros dos prisioneros políticos, realizó su primera huelga en prisión para exigir la liberación de todos los encarcelados en Cuba por motivos políticos.

En octubre de 2023 inició otra huelga de hambre y estuvo varios días incomunicado. En esa ocasión la protesta se debió a las negaciones de libertad condicional.

Tanto su familia como organizaciones defensoras de los derechos humanos han denunciado en reiterados momentos que el joven ha sido maltratado, aislado e incomunicado en prisión, por orden de la Seguridad del Estado.

García Lorenzo fue detenido el 11 de julio de 2021, cuando ya regresaba a su vivienda, luego de participar en las protestas pacíficas de su ciudad. En la detención fue golpeado y obligado a entrar a una patrulla policial.

El régimen lo condenó a cuatro años de cárcel. En mayo de 2022 fue excarcelado provisionalmente, pero a los cinco días fue devuelto a prisión.

Parte de su familia fue obligada a exiliarse en noviembre de 2022, debido al activismo que realizaban a favor de la liberación de los presos políticos.  
 


Derechos Humanos