Embajada de Estados Unidos en Cuba pide la inmediata liberación de José Daniel Ferrer

La embajada de Estados Unidos en La Habana emitió este martes un contundente llamado para la liberación inmediata de José Daniel Ferrer, líder de la UNPACU, exigiendo además pruebas de vida tras informes de un brutal ataque sufrido por Ferrer en la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba.

La embajada de Estados Unidos en Cuba en una publicación en redes sociales, instó al régimen a garantizar el acceso de la familia al opositor y expresó su preocupación por las denuncias de tortura.

"Nos unimos a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para expresar nuestra profunda preocupación por el maltrato del gobierno cubano hacia José Daniel Ferrer. El Jefe de Misión Hammer habló con su hermana esta tarde. Instamos al gobierno cubano a proporcionar a su familia acceso directo y a liberar a José Daniel, así como a todos los presos políticos en Cuba", se lle en la página de Facebook de la embajada estadounidense.

Ferrer ha sido un blanco constante del régimen desde la Primavera Negra de 2003, cuando fue condenado a 25 años de prisión por su papel como líder del Movimiento Cristiano Liberación y promotor del Proyecto Varela. Tras ocho años encarcelado, y declarado prisionero de conciencia por Amnistía Internacional, Ferrer fue excarcelado en 2011 pero continuó con su activismo.

En julio de 2021, Ferrer fue detenido nuevamente cuando intentaba llegar al lugar donde se desarrollaban protestas masivas en Santiago de Cuba. En ese momento, se le revocó una condena de cuatro años que cumplía en reclusión domiciliaria, marcando su tercer encarcelamiento por razones políticas.

El 20 de noviembre, Ana Belkis Ferrer, hermana del líder opositor, denunció que Ferrer había sido agredido brutalmente en la cárcel de Mar Verde. Días después, una fuente que logró verlo informó que se encontraba hospitalizado con evidentes señales de maltrato físico, incluyendo una herida en el rostro.

"Está muy delgado, brutalmente golpeado", relató Ana Belkis, quien acusó al gobierno cubano de limitar el acceso al hospital donde permanece Ferrer para evitar que se conozcan detalles de su estado de salud. Su esposa, Nelva Ismaray Ortega, también ha enfrentado obstáculos para obtener información directa sobre su situación.

“Seguimos exigiendo muestras de vida de mi valiente y abnegado hermano, así como su liberación inmediata y la de todos los presos políticos en Cuba”, escribió Ana Belkis en sus redes sociales.

La embajada de Estados Unidos en Cuba en una publicación en redes sociales, instó al régimen a garantizar el acceso de la familia al opositor y expresó su preocupación por las denuncias de tortura.

El nuevo jefe de misión de Estados Unidos en Cuba, Mike Hammer, contactó personalmente a Ana Belkis Ferrer para expresar solidaridad y reiterar el compromiso de su gobierno con los derechos humanos. Además, organismos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han manifestado su inquietud por el trato hacia Ferrer.