¿Las deportaciones masivas planeadas por Trump afectarán a los cubanos?
Trump podría implementar cambios significativos en las políticas migratorias existentes que podrían afectar a miles de personas que actualmente residen en Estados Unidos
Actualizado: November 25, 2024 10:32am
El abogado de inmigración Wilfredo Allen considera que los cubanos amparados bajo la Ley de Ajuste Cubano (CAA, por su sigla en inglés) estarían en una posición más protegida frente a los planes de deportación masiva anunciados por el presidente Donald Trump.
Allen, un abogado cubanoamericano radicado en Miami con amplia experiencia en casos de inmigración, afirmó en una entrevista con la Voz de América que una deportación masiva de millones de migrantes indocumentados sería “físicamente imposible e incosteable”. Sin embargo, advirtió que Trump podría implementar cambios significativos en las políticas migratorias existentes que podrían afectar a miles de personas que actualmente residen en Estados Unidos, especialmente a aquellas que ingresaron recientemente bajo programas de protección temporal.
Entre los grupos más vulnerables, según Allen, se encuentran los venezolanos, nicaragüenses y haitianos, quienes no cuentan con una ley específica que respalde su permanencia en el país. En cambio, los cubanos tienen la ventaja histórica de la Ley de Ajuste Cubano de 1966, que permite a los nacionales de la isla solicitar residencia permanente tras haber permanecido en territorio estadounidense por, al menos, un año y un día, tras haber sido admitidos legalmente, ya sea con una visa o con un parole.
Para los cubanos que llegaron antes del 20 de enero de 2017, cuando Obama eliminó la política de “pies secos, pies mojados”, la CAA sigue siendo un recurso crucial. Este marco legal, exclusivo para los migrantes de Cuba, les otorga un camino privilegiado hacia la legalización, algo que los distingue de otros grupos migrantes.
No obstante, Allen advirtió que las políticas de Trump podrían enfocarse en los cubanos que han ingresado recientemente bajo el programa de parole humanitario instaurado por la administración Biden. Este programa ha permitido la entrada de más de 110,000 cubanos, quienes aún no califican para la CAA. Según Allen, Trump ha prometido que deportará a aquellos que ingresaron bajo este esquema, lo que podría convertirse en una realidad si cumple con su agenda migratoria.
El parole humanitario ha sido una de las principales vías de entrada para ciudadanos de Nicaragua, Haití, Venezuela y Cuba en los últimos años. Desde su implementación, este programa ha permitido a más de 600,000 personas obtener autorización para residir y trabajar en Estados Unidos, incluyendo a 110,240 cubanos que ya están en el país. Sin embargo, Allen considera probable que Trump elimine este mecanismo una vez que retome la presidencia el próximo 20 de enero.
Es importante destacar que el parole humanitario de Biden no establece ningún compromiso legal para permanecer en el país después de dos años, lo que significa que, tras ese período, aquellos que no hubieran ajustado su estatus migratorio en otra categoría tendrían que abandonar el país.
El Partido Republicano ha dejado claro que la seguridad fronteriza será una de sus prioridades. Su plataforma incluye medidas como completar el muro en la frontera con México, intensificar los controles migratorios y deportar a millones de inmigrantes indocumentados. Aunque las deportaciones comenzarán con “los criminales más peligrosos”, según la agenda republicana, los detalles sobre cómo afectará esto a quienes llegaron bajo programas temporales, como el parole humanitario, aún no son del todo claros.
A pesar de la aparente protección que ofrece la Ley de Ajuste Cubano, Allen insta a la comunidad cubana a mantenerse alerta ante los posibles cambios en las políticas migratorias. Si bien quienes llevan más tiempo en el país tienen mayor seguridad, aquellos que llegaron recientemente bajo el parole humanitario podrían enfrentarse a mayores desafíos legales si este programa es eliminado.
Por otra parte, cabe preguntarse si las autoridades cubanas aceptarían la deportación de miles de cubanos que tienen un estatus temporal. Hasta ahora, el castrismo ha mantenido una política de aceptación mínima y selectiva de deportados.