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La rastra de la muerte: otro crimen de la dictadura cubana

En ese vehículo, cerrado herméticamente, los detenidos fueron trasladados durante ocho horas de Playa Girón a La Habana y el saldo de fallecidos por asfixia fue de diez personas

Actualizado: May 3, 2023 1:27pm

Han pasado más de 60 años desde la invasión a Bahía de Cochinos, aquel intento de liberar a Cuba que terminó rápidamente y dejó a más de 1000 jóvenes capturados por el régimen de Castro.

El 22 de abril de 1961, luego de haber sido derrotados, un grupo de alrededor de 100 miembros de la brigada 2506 vivió uno de los episodios más horrendos de la historia de Cuba, conocido como La rastra de la muerte.

Los detenidos, incluso algunos heridos, fueron alineados frente a una rastra y las autoridades les ordenaron montar en ella, según datos del Cuban Studies Institute.

En este vehículo, cerrado herméticamente, fueron trasladados durante ocho horas de Playa Girón a La Habana y el saldo de fallecidos por asfixia fue de diez personas.

William Muir, cubanoamericano sobreviviente de este crimen, contó su historia a ADN Cuba.

"La rastra, cuando la cierran, no solo es completamente oscura, es el calor de ese momento en el sur de Cuba (...) Nos apilonan de tal manera que uno no se puede sentar ni nada (...) Solo dejamos un poco de espacio delante donde pusieron a los heridos", explicó Muir.

Los opositores lograron abrir con las hebillas de sus cinturones algunas ranuras de las paredes de metal de la rastra para poder respirar por turnos.

En la desesperación del momento, el grupo intentó volcar la rastra para intentar escaparse y las autoridades al mando la detuvieron.

Los militares abrieron entonces varios huecos en las paredes de la rastra con sus ametralladoras y, de esta forma, pudo sobrevivir la mayoría, luego de horas de tortura.

"En el momento que llegamos a La Habana había nueve muertos y uno que llevan al hospital, muere allí. Vino Fidel Castro y nos dijo que la culpa de todo la tenía el chofer de la rastra", añadió el veterano. 


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