Julián Mazola: 12 años de cárcel por salir a la calle el 11J

Mazola fue uno de los jóvenes que se movilizó en San Antonio de los Baños, la primera ciudad en protestar, y a los que el régimen castiga por encender la llama de la rebelión.
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La Fiscalía de Cuba pide 12 años de cárcel para el joven Julián Mazola, de San Antonio de los Baños, uno de los que encabezó la protesta del 11 de julio en ese municipio, el primero en salir a las calles.

Mazola se encuentra encarcelado en la prisión de Guanajay, Artemisa. Según declaraciones de la familia, en el penal lo han encerrado en celda de castigo y le han propinado golpizas, además de mantener comunicación intermitente con ellos.

San Antonio de los Baños fue la primera ciudad donde se reportaron protestas el 11 de julio y desde donde se esparció la noticia del levantamiento al resto del país ese mismo día. Las penas que solicitó Fiscalía al Tribunal Municipal para los manifestantes arrestados oscilan entre 6 y 12 años de cárcel.

Unas 17 personas están siendo juzgadas por su participación en la manifestación pacífica del pasado 11 de julio allí.

Yoan de la Cruz, el joven que transmitió en directo la marcha, podría sufrir 8 años de cárcel por los delitos de “desacato” y “desorden público”. De la Cruz fue arrestado en su casa sin que mediara orden judicial

Las sanciones más elevadas, 12 años, son para Rolando Yusef Pérez Morera y Joel Díaz Hernández.

De la Cruz y Mazola son señalados como los que “animaron a denigrar a Miguel Díaz-Canel, a Raúl Castro y a la Policía como institución”, así como al orden económico social del país “con la intención de crear el caos en el territorio”, dice el documento oficial, al que tuvo acceso 14yMedio.

La ONG Cubalex, que asesora a defensores de derechos humanos, suma en su listado casi 700 detenidos y desaparecidos durante las protestas pacíficas, aunque la cifra superó el millar en agosto.

La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos humanos (CIDH) condenó las violaciones a los derechos humanos durante las jornadas de protesta.

 

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