Cuba: Hyundais para turistas, pocas ambulancias para el pueblo

Transtur, perteneciente al Ministerio del Turismo de Cuba, anunció la renovación de su flota con casi 800 automóviles 0 km, en medio de una crisis de transporte
Viejos autos utilizados como ambulancias en Cuba, y modernos Hundays para turismo
 

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La empresa estatal Transtur, perteneciente al Ministerio del Turismo de Cuba, anunció la renovación de su flota con casi 800 automóviles, en medio de una crisis de transporte y falta de ambulancias.

“No hay mejor manera de celebrar el Aniversario 41 [de la empresa] que dar la bienvenida a nuevos autos, 0 km, modernos, y confortables. Muy pronto a disposición de nuestros clientes en la renta de autos en toda Cuba”, anunció Transtur en su página de Facebook.

En otro post, la entidad publicó más fotografías de “nuestra flota renovada” con carros de las marcas y modelos Kia Picanto, Hyundai Elantra y Santa Fe, entre otros.

“Suman cerca de 800 vehículos que usted podrá rentar muy pronto en nuestras oficinas y en la nueva web que pondremos a su disposición”, añadió Transtur.

Varios usuarios de Facebook criticaron, mediante comentarios a las publicaciones, que el gobierno destine recursos a comprar autos para turistas y no para el sistema de salud pública.


“Qué descaro. Por qué no cogieron ese dinero para arreglar los hospitales y escuelas, el pueblo no tiene qué comer (…)”, opinó Leonardo Expósito.

Otros internautas, como Santos Yunior Add se preguntan al ver cientos de automóviles modernos: “¿Y el bloqueo?”

“¿En serio no les da pena publicar esto? No le demuestren más al pueblo lo poco que les importa, al menos no suban estas estupideces que niños se están muriendo en los hospitales porque según ustedes no hay dinero y están en la quiebra, así [que] tengan vergüenza y no renueven más carros pa los extranjeros y compren ambulancias pa los cubanos”, comentó el usuario identificado como Sean Bernstein.

Según Antonio Peña, “así es como el comunismo destroza un gran país como lo fue Cuba. No queda nada, NI VERGÜENZA”.

Orley González criticó que “para eso si hay dinero (…) los hospitales son una asquerosidad, los policlínicos igual, no hay medicinas, los enfermos muriéndose, las carreteras destruidas, los puentes llenos de huecos, las casas de los cubanos cayéndose en pedazos, barrios sin agua por semanas, no hay víveres en las tiendas para comer, pero al turismo ustedes si 'le ponen corazón' (…) USTEDES VAN A PAGAR LA FACTURA CUANDO UN DIA EL PUEBLO DECIDA ROMPER LAS CADENAS DE TU DICTADURA CANEL…!!!!!!”

También Teresa Reyes denunció que “NO HAY AMBULANCIAS, NI MEDICAMENTOS, Y LOS HOSPITALES DESTRUIDOS, ¿Y SON CAPACES DE PUBLICAR LO QUE ES PARA USTEDES UN LOGRO? LO QUE NO TIENEN ES VERGÜENZA”.

El portal oficialista Ecured informa que el Grupo Empresarial Transtur S.A. “es el transportista del Ministerio de Turismo” de Cuba y “la mayor empresa de su tipo en el país, con más de 25 años de experiencia en el turismo internacional”, con más de 250 dependencias en toda la isla.

La empresa estatal posee una flota de más de 7 mil vehículos y en Ecured se afirma que controla otras marcas como Cubacar, Havanautos y Rex (para la renta de autos); Transtur Ómnibus; y el sistema de buses turísticos Hop-on Hop-off”.

 

La tragedia de las ambulancias en Cuba

Durante la pandemia de la COVID-19 se agudizó la crisis del Sistema Integrado de Urgencias Médicas (SIUM), un servicio que no disponía de suficientes ambulancias antes de la llegada del coronavirus a Cuba, en marzo del 2020.

Raúl Durán Verdecia denunció el 4 de febrero del 2021 que su madre sufrió un infarto cardiovascular, pero la ambulancia que debía llevarla al hospital tardó dos horas en llegar y la anciana murió.

En marzo de este año, el doctor Alexander Jesús Figueredo expuso en redes sociales el caso de Yamilian Tamayo, una cubana que llegó enferma de coronavirus de un viaje a Rusia y murió en un centro de aislamiento por falta de combustible para una ambulancia que la trasladara al hospital.

Figueredo llamó “asesinato” a la muerte de la paciente, un desenlace sobre el que incidieron otras negligencias del personal médico.

El 15 de abril, Samuel Rodríguez criticó la falta de una ambulancia para transportar a un niño pequeño que sufrió una fractura.

“El colmo de una dictadura mafiosa que se proclama potencia medica mundial. Mi sobrina en Encrucijada —Villa Clara— con su niño, con el brazo partido, esperando una ambulancia que nunca llegó. Hubo que pagar un [taxi] particular (…) Yo aseguro que si la emergencia fuera tener un cartel reclamado un derecho, cualquier derecho, tendrían una respuesta inmediata de 3-7 patrullas en minutos”, agregó.

Ante la crisis de vehículos para los pacientes en medio de la pandemia, el régimen recurrió a transportistas privados en varias provincias, como Guantánamo y Holguín. En este último territorio, los pobladores de San Germán vieron como carretones de caballos fueron utilizados como improvisadas “ambulancias”, a falta de autos.

En la occidental provincia de Pinar del Río, un viejo ómnibus fue reformado para labores hospitalarias, reportó la televisión estatal en septiembre último.

“Estamos enfrascados, para seguir apoyando (…) [en] la conversión de un ómnibus que tiene un salón con cierta capacidad y estamos habilitándolo para el traslado en ambulancia. O sea, con camas, asientos…”, declaró Ariel Bencomo López, director de la Empresa Provincial de Pasajeros por Ómnibus.

Lázaro Giraldo Lóriga, uno de los mecánicos, explicó que el vehículo “lo trajimos de La Habana en mal estado y lo hemos recuperado, y [estamos] tratando de resolver el problema, de ponerles unas camillas… a veces hay muchos pacientes y hay que trasladarlos. Espero que aquí sea [más rápido] el traslado, cabe más gente, y como está el lío de la COVID hay que hacer lo que haya que hacer”.

“Queremos incorporar el ómnibus este como si fuera realmente una ambulancia, por el déficit que hay”, dijo Osmany Lugo Valdés, jefe del sistema de urgencias en Pinar del Río.

 

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