Es sabido que ni el régimen cubano, ni su monopolio estatal de las telecomunicaciones Etecsa, aceptan las críticas o las opiniones de los habitantes de la empobrecida “Mayor de las Antillas”. Pero siempre queda tiempo para sorprenderse con alguna otra idea delirante que pretende desconocer los reclamos de la ciudadanía.
Tal es el caso de la acusación realizada desde el medio de propaganda oficial Cubasí, contra la iniciativa de activistas de la sociedad que convocaron a una protesta en redes sociales contra los altos precios del ineficiente servicio de internet en la isla.
Según un texto del director de ese periódico digital, el tuitazo el próximo sábado 30 de mayo para exigirle a Etecsa que baje sus precios y establezca tarifas planas, es parte de una “campaña de odio contra Cuba”, que según él articulista estaría orientada desde la mismísima Casa Blanca.
El comentario de Manuel Henríquez Lagarde, conocido represor de las libertades de opinión y prensa, es una casi ininteligible mezcla de reporte publicitario de la empresa de telecomunicaciones, con propaganda castrista y acusaciones infundadas contra la ciudadanía a la que ni en el espacio digital le está permitido reclamar sus derechos.
Lagarde afirma que todo lo que no se alinee con las políticas del castrismo -dígase los medios de periodismo independiente, los comentarios de usuarios en redes sociales, los influencers y las demandas a Etecsa de cualquier usuario- forma parte del “aparato de propaganda que el gobierno de Estados Unidos utiliza para desinformar al pueblo de Cuba” en tiempos de pandemia.
Pero al no lograrlo según la narrativa del vocero oficial -que incluso ha sido respaldado públicamente por el presidente Miguel Díaz-Canel-, se habría creado otro plan yanqui, esta vez para restarle “prestigio” a Etecsa: la convocatoria ciudadana al tuitazo con demandas a la única y poderosa compañía que provee servicios de conectividad en Cuba.
“No es de extrañar (…) el desconcierto de quienes viven de las campañas de odio contra Cuba, por lo que no les ha quedado otra opción que recurrir, en su habitual falta de originalidad, a viejas fórmulas”, escribe paranoide.
“Tal es el caso de la reedición el próximo fin de semana de un tuitazo para pedir que la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba baje los precios de internet porque, según los presuntos convocantes 'cubanos', la conexión durante la pandemia es de mala calidad y otros países lo han hecho”, afirma Lagarde.
El funcionario-libelista cree que desde una tenebrosa oficina de inteligencia norteamericana se trata de “manipular descaradamente una de las principales demandas de la población”, y no se da cuenta en su ignorancia que al escribir incoherentemente reconoce que los cubanos tienen en muy poca estima a la “querida Etecsa” de Lagarde.
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Los fallos de la empresa, no faltaba más, son culpa del embargo de Estados Unidos, como si los millones de dólares que recibe por recargas en divisa desde el extranjero estuvieran sujetos a sanciones.
Además, suelta Lagarde una lágrima de cocodrilo: “el anunciado tuitazo tendrá lugar cuando más Etecsa ha hecho por satisfacer a sus clientes”.
¿Será por malagradecidos que los cubanos no dejan de reclamar y denunciar como estafas las ofertas del emporio estatal?
A pesar de que el régimen persigue y sanciona a quienes ejercen su libertad en internet, las iniciativas continuarán. Para el el próximo tuitazo, el usuario @joh_wayne7 hizo un llamado a los cubanos que viven en el exterior a que se sumen: “Cuba vamos a organizarnos y a exigirle a Etecsa que nos escuche como pueblo y nos respete como clientes. Próximo Sábado 30 de mayo Tuitazo Cubano. No importa si estás dentro o fuera de Cuba, esta es tu tierra y también son tus derechos. #PreciosJustos #TarifaPlanaYa”.
En respuesta a su tweet otros usuarios respondieron mostrando su apoyo y dando sugerencias para el sábado. @Zaraki_Kempachi, quien muestra en su perfil cómo lleva varios meses denunciando las estafas de la compañía, opinó que lo más factible es pedir que mejoren los servicios ya que la internet por datos móviles es inestable en el país.
En las últimas semanas una multitud de usuarios del monopolio cubano ha volcado sus críticas en las redes sociales por el mal proceder de la entidad.
Entre los usuarios afectados está el joven cineasta Andy Ruiz quien dice haber gastado casi 600 dólares en los últimos seis meses para mantener la internet de datos móviles. Sobre las razones de Etecsa dijo que “no convenció a nadie, al menos nadie que conozca, por el contrario, sentí como si me estuvieran regañando, por no saber usar bien mis datos. Bueno, con ellos, hago lo que me parezca, para eso los pago”.
Imagen de portada: detalle de una ilustración satírica de Xel2, suplemento independiente de humor gráfico
