Este 22 de mayo el periódico oficialista Juventud Rebelde alegó en un artículo publicado en su versión digital, que las muertes por COVID-19 serían tres veces mayor que lo registrado hasta la fecha desde que fueron reportados los primeros casos de la enfermedad.
La información con la que el citado medio estatal desarrolla su texto está basada en afirmaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cual en su informe anual de Estadísticas Sanitarias Mundiales, calculó que el total de muertes por la pandemia en 2020 fue de al menos 3 millones, 1,2 millones más que la cifra de 1,8 millones comunicada oficialmente.
"La Organización Mundial de la Salud señaló este viernes que el número real de muertes provocadas de manera directa o indirecta por la COVID-19 podría ser el doble o el triple que actualmente registrado oficialmente, el cual, considera puede haber sido subestimado significativamente", refirió Juventud Rebelde.
Al respecto, según una nota de Reuters, la OMS apuntó que "es probable que nos encontremos ante un importante subregistro del total de muertes atribuidas directa e indirectamente al COVID-19".
Asimismo, la organización fundamentó su explicación en "la falta de sistemas fiables para registrar las muertes en algunos países", a lo que añadió el hecho de que "en muchos casos las personas murieron antes de que se les hicieran las pruebas del virus, mientras que algunos no pudieron recurrir a la atención sanitaria por otras afecciones", algo que deja mucho que desear si se pretenden tomar estas aseveraciones como evidencias, pero que al régimen le interesa remarcar como parte de su discurso sobre la gestión que ha dicho hacer ante la pandemia.
Aun así el periódico oficialista da por sentado que las afirmaciones de la OMS son reales, razón por la que señala que "hasta el 20 de mayo de 2021, cerca de 3,4 millones de personas murieron como consecuencia de COVID-19 a nivel mundial".
A lo anterior Juventud Rebelde agrega, como si ya su alarmismo no fuera suficiente, que "ahora, con el aumento del número de muertes en América Latina y en Asia debido a las nuevas variantes del coronavirus, el número de fallecidos 'sería realmente dos o tres veces mayor'", según afirmó Samira Asma, subdirectora general de la OMS en su división de análisis de datos.
"Así que creo, con seguridad, que una estimación de alrededor de 6 a 8 millones de muertes podría ser confiable, aun con cierta reserva", dijo Asma en una conferencia de prensa virtual.
Con esto como base aun así la administración de Miguel Díaz Canel pretende que el pueblo cubano y el mundo crean que sus cifras de enfermos y fallecidos son reales, más aun cuando los cubanos no han dejado de denunciar en redes sociales y en medios independientes el deficiente manejo de la pandemia en el país, el cual a todas luces responde más a cuestiones políticas que a la falta de capacidades y recursos, algo que debiera señalar la OMS y más de una institución internacional.