Cubana lleva 10 años intentando que gobierno corte árbol que afecta su casa

Elba Pérez Leyé es una santiaguera que lleva 10 años intentando que el gobierno corte un árbol que afecta su casa, la cual está en peligro de derrumbe por esta razón
Cubana lleva 10 años intentando que el gobierno corte un árbol que afecta su casa
 

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Constantemente aparecen en redes sociales denuncias sobre la tala de árboles en las diferentes ciudades del país. Árboles que, más allá de su propósito ornamental, ayudan con su sombra a mitigar el calor de esta isla o dan cobijo y alimento a las aves e insectos.

Contrario a esto, hay lugares donde se requiere que las brigadas forestales o de servicios comunales actúen para evitar que la caída de un árbol o algunas de sus ramas dañen la propiedad privada o incluso la propia vida de alguien, pero para esos casos siempre hay morosidad por parte del estado, o falta de recursos, o ambas.   

Este es el caso de Elba Pérez Leyé, quien reside en Jagüey No. 104, entre Padre Pico y Escudero, en la provincia de Santiago de Cuba, y en una carta que enviara a la redacción del diario estatal Juventud rebelde se queja de que su casa, ubicada en el casco histórico de esa ciudad, presenta seria afectación estructural debido al crecimiento continuo de un árbol al lado de ésta, en el local de un antiguo almacén de decomisos.

Elba Pérez precisa en su carta que el árbol tiene raíces largas y fuertes que han penetrado en las paredes, columnas y techo de su vivienda, lo que ha provocado ruptura y agrietamiento de gran magnitud y filtraciones, tanto en planta baja como en la azotea.

Explica además que su situación ha sido planteada en diversas instancias y en el Gobierno provincial, pero no ha tenido respuesta alguna; y ha intentado cortar el árbol varias veces en los últimos 10 años, pero sin resultados.

Sin más recursos, y ante el peligro de derrumbe al que está expuesta, Elba se dirigió a la sección de Acuse de Recibo del periódico estatal Sierra Maestra, en Santiago de Cuba, donde consiguió que publicaran su caso en diciembre de 2017.

Debido a esto le enviaron una representación de la Empresa de Servicios Comunales, la cual planteó que todo lo que podían hacer era cortar el árbol, pero no garantizaban su total eliminación, pues no contaban con los productos químicos necesarios para erradicarlo definitivamente.

"Teniendo en cuenta que Santiago de Cuba se encuentra en la falla geográfica más activa en cuanto a movimientos sísmicos, le planteo mi preocupación y temor por la integridad de mi vivienda y de mi familia", asevera Elba en su carta, a la cual el diario Juventud Rebelde le dio acuse de recibo este 24 de junio.

 

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