Un hombre asaltó una vivienda en Santiago de Cuba y amenazó con una pistola a la ciudadana Yamila de la Cruz Chaveco para robarle, informó este miércoles el noticiero América Noticias, del canal 41 de Miami.
“Mi tía estaba en la casa sobre las cinco de la mañana y luego de despedir a su esposo que iba a trabajar, entró un hombre con una pistola en la mano, la amenazó para que no gritara –ella estaba allí con su hijo menor de edad, que se encontraba durmiendo– y le robó la computadora y un teléfono celular”, declaró Miguel Cintra, sobrino de la víctima, al noticiero de América TeVé (canal 41).
El sujeto huyó con los bienes y la víctima del robo salió a gritar a la calle. Los vecinos se despertaron y muchos salieron, conmocionados por el hecho violento que forma parte de una ola de crímenes que minimiza el régimen.
Yamila de la Cruz Chaveco confirmó a América Noticias lo relatado por su sobrino Miguel Cintra. Hasta el momento las autoridades no han dado con los responsables, pero enviaron perros e investigadores al barrio donde ocurrió el robo a mano armada.
Desde finales de 2021 en las redes sociales se viralizan videos y denuncias de ataques dueños de vehículos, principalmente motos eléctricas, y otros hechos delictivos en Cuba, aunque la prensa estatal hace silencio y las instituciones policiales niegan que haya aumentado la criminalidad.
Las redes exponen violencia e inseguridad ciudadana
A finales de diciembre pasado el artista y maestro cubano Manuel de la Cruz fue apuñalado en plena calle para robarle su celular, según denunció en sus redes sociales.
El Club MEC (Moto Eléctrica Cuba) instó a tomar acciones cívicas contra la inseguridad ciudadana, tras una ola de asaltos en las carreteras de la isla y la poca respuesta de las autoridades a estos incidentes.
“No cabe duda que ya ningún lugar en la calle es seguro para nosotros los ciudadanos”, denunciaron los administradores de la página en Facebook del grupo.
“Queremos iniciar una especie de ayuda entre nosotros mismos para saber los lugares que han tenido incidencias en los últimos días, y que de alguna manera las autoridades tengan acceso a esta información de sus comentarios sobre donde suelen ocurrir este tipo de eventos”.
Invitaron a los seguidores de la página a escribir “en los comentarios los lugares que ha sabido [que] han robado y el método que han usado estos rateros para el robo de motos, asalto a autos, arrebato de móvil, etc”.
Concluyeron la publicación, dirigida también explícitamente a la “Presidencia de Cuba”, con las etiquetas #SOSCuba #QueremosUnPaísSeguro y #NoMásAsaltos.
El Ministerio del Interior (Minint) negó que en la isla exista un estado de inseguridad por los frecuentes asaltos en la vía pública.
En una nota oficial, la entidad aseguró que algunos hechos que se hicieron públicos en las redes “son sucesos ocurridos en años anteriores o noticias falsas”, compartidos “con la pretensión de generar un clima de impunidad e inseguridad ciudadana en medio de las festividades de fin de año”.
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Pero a inicios de enero fue noticia el hallazgo de un cadáver en un río de La Palma, en el municipio Arroyo Naranjo de La Habana. Un video compartido por la internauta Maritza Rodríguez muestra como el cuerpo es sacado del agua por dos personas y trasladado a la orilla, donde se encuentran oficiales del Minint.
En días recientes vecinos del barrio La Solita, del municipio habanero Arroyo Naranjo, atraparon a dos presuntos ladrones que intentaron ingresar a una vivienda para robar, denunciaron usuarios en redes sociales.
Un video difundido en Facebook por Wilfredo López muestra a los supuestos ladrones amarrados con cintas amarillas en la calle, al parecer en espera de que llegara la policía. Uno de ellos se encontraba atado de manos y pies y boca abajo en la calle.
“Metiéndose donde hay niñas y todo. Descarado que eres”, alegaba una de las vecinas de La Solita. “¿Quién te mandó y cómo tú viniste a parar aquí?”, le preguntaba una mujer a uno de los presuntos criminales.
Decenas de vecinos en las afueras de sus viviendas no paraban de insultar a los dos ladrones y proponían golpearlos, mientras que otros llamaban a la calma y no tomar la justicia por sus manos.