El condado Miami-Dade planifica la reapertura gradual de espacios públicos, aunque todavía no hay fecha precisa: respetando las medidas de emergencia, y que los grupos no excedan las 10 personas.
“Cualquier apertura será guiada por los expertos médicos. No se reiniciará ninguna actividad en contra de las recomendaciones de Salud”, aclaró el alcalde del condado, Carlos Giménez.
De los más de 26 mil 600 contagios y casi 800 muertes que el nuevo coronavirus ha producido en Florida, más de la mitad están repartidos entre los condados de Miami-Dade, Broward y Palm Beach.
El alcalde de Miami-Dade convocó para el lunes una reunión virtual comunitaria para discutir los pasos a seguir en esta localidad, que presenta la mayor cantidad de muertos e infectados, con 223 y 9 mil 657, respectivamente, hasta el último reporte del lunes.
Precisó que aún no tienen “un cronograma para volver a abrir”, pero dijo que la primera fase contempla la reapertura de los parques, desde la mañana hasta el atardecer.
Luego se prevé abran las rampas para botes con horario limitado y restricciones. También se reducirá el número de personas en las embarcaciones. Asimismo, podría comenzar el alquiler de jet skies con límites de una persona y protocolos de desinfección después de cada uso.
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También abrirían las rampas para kayaks y canoas. Se ha previsto que los campos de golf comiencen sus actividades manteniendo la distancia social e implementando medidas sanitarias especiales.
La tan anhelada reapertura de las playas sería un esfuerzo coordinado entre las ciudades de playa y el condado de Miami-Dade, e incluso con la colaboración de otros condados del sur de Florida. No se permitirán las reuniones de diferentes familias, ni las sillas ni los accesorios de playa.
La policía de Miami Dade, los departamentos locales de policía y la Guardia Costera trabajarán para supervisar las medidas de distanciamiento social sin excepción.
