La suspensión del Ministerio de Cultura de Cuba de eventos públicos con aglomeraciones y de festejos en casas de la Música o centros nocturnos no aplicó para Sandro Castro, ni para su EFE Bar, ubicado en las céntricas calles de 23 y F en el Vedado capitalino.
La semana pasada el más farándulero de la familia Castro, compartió en sus redes sociales una historia que indicaba que su bar continuaría abierto de “lunes a lunes” a pesar de la prohibición del MINCULT.
Tal parece que las leyes y disposiciones administrativas no van mucho con él, aun cuando el mundo se encuentra condicionado por los embates de una pandemia para la que todavía no hay medidas lo suficientemente efectivas
Y es que este "joven empresario", dueño de varios bares en La Habana, esperó hasta el último momento para cerrar las puertas de su bar EFE. Fue hasta este sábado cuando, el miembro de la dinastía castrista, lo hizo efectivo, curiosamente después de compartir en redes una fotografía que ironizaba con la campaña de #Yomequedoencasa.
La semana pasada, también estuvo en el ojo del huracán con la imagen que compartió donde se muestra con una mascarilla profesional, muy distante de los nasobucos caseros que utiliza la población e incluso empleados de los aeropuertos y centros hospitalarios cubanos.
Mientras a muchos de los médicos y estudiantes de medicina, no se les garantizan los medios de seguridad necesarios durante el período de "pesquisa" del Coronavirus, el heredero de los Castro, se mostró portando la mascarilla respiratoria FFP-3 (BLS Zero 31). Esta mascarilla profesional está recomendada para la protección contra la gripe porcina, el virus A / H1N1 y otras variantes; así como el virus de la gripe aviar A / H5N1.
Entre la 'monarquía cubana', que permanentemente y de manera indirecta llevan a cabo el discurso de "haz lo que digo y no lo que hago", sin duda destaca Sandro Castro.
El nieto más farandulero del extinto dictador Fidel Castro, está constantemente en el ojo del huracán por presumir de un estilo de vida que dista mucho del altruismo que se supone caracteriza las 'pautas sociales del comunismo', al menos aquellas que se exigen para el común de los cubanos.
En el momento de la redacción de esta nota, Sandro publicó en su historia de Instagram que a partir de este sábado 21 de marzo, las puertas de su bar -al fin- cerraban.
Más de 28 mil cubanos se encuentran bajo supervisión médica en sus hogares por sospecha de coronavirus, informó este 21 de marzo en conferencia de prensa José Raúl de Armas, jefe del Departamento de Enfermedades Transmisibles del Ministerio de Salud Pública (Minsap).
Estas personas tienen síntomas leves o mantuvieron contacto lejano con algún sospechoso fuerte o persona infectada con el virus, por lo que sus probabilidades de contagio son pocas y pueden ser monitoreadas por las autoridades sanitarias locales, explicó el especialista.