Lourdes Rodríguez Benítez, una diputada a la Asamblea Nacional del Poder Popular en Cuba por el municipio capitalino de San Miguel del Padrón, lamentó este viernes que los cubanos que “viajan al exterior y no regresan al país”, sigan recibiendo la canasta básica familiar.
“Estamos hablando de un programa que el gobierno cubano prioriza y subsidia, y que reporta grandes gastos a la economía, por lo que no debemos permitir que esto siga ocurriendo”, dijo la diputada durante una de las sesiones del Parlamento cubano en el Palacio de Convenciones de La Habana.
A la preocupación de Rodríguez, respondió la ministra cubana de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, quien dijo que este sería de un “planteamiento reiterado”, y que el jefe de núcleo es el responsable de “dar baja” a los miembros de su hogar que viajan al exterior y no regresan en un plazo de 90 días, según establecen las leyes.
La ministra aclaró también que la Ley de Migración vigente en la Isla otorga a los cubanos un plazo de hasta 24 meses para regresar al país antes de perder los derechos de residencia.
“Es por ello que tenemos que estudiar y establecer un término mínimo, teniendo en cuenta también las personas que residen en el exterior por misiones de trabajo”, agregó Díaz.
Lea también
Tras esas intervenciones, Esteban Lazo, Presidente de la Asamblea y del Consejo de Estado, “convocó a analizar este problema y buscarle una solución”, según el reporte in situ del diario oficialista Granma.
Lourdes Rodríguez, la promotora de la idea, se desempeña como Operadora de Cámara de Video del Túnel de la Bahía de La Habana, según un perfil disponible en Ecured. Fue elegida diputada en abril de 2018 para actual Legislatura del Parlamento cubano.
Los diputados cubanos se encuentran en La Habana celebrando el IV Periodo Ordinario de Sesiones de la IX Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular. Las sesiones ocurren este viernes y se extenderán hasta el sábado en el Palacio de Convenciones.
La llamada “libreta de abastecimiento” es indispensable para el sustento de muchos cubanos que no tendrían como acceder a esos productos básicos para la alimentación si dependieran de los precios que impone el mercado “no racionado”.
En varias ocasiones las autoridades han emprendido campañas para eliminar el subsidio a las personas que se encuentran fuera del país. Incluso a quienes se encuentran cumpliendo misiones gubernamentales, se les insiste para que sus familiares en la Isla cumplan la norma establecida, y voluntariamente acudan a retirarlos del registro de consumidores.